16 cuerpos en una camioneta y 4 decapitados, colgados de un puente: el horror sin fin de la guerra en Sinaloa

A un año del inicio de la guerra al interior del Cártel de Sinaloa, la batalla arrecia. En las últimas horas, las autoridades han hallado los cuerpos de 20 personas, asesinadas a balazos y abandonadas en la carretera México 15, al norte de la ciudad de Culiacán. Cuatro de esas personas han sido decapitadas y colgadas desde sus extremidades en un puente. Los otros han aparecido en una camioneta.

Las primeras noticias del hallazgo trascendieron durante la noche del domingo, alrededor de las 23:30. Las autoridades manejaban un informe preliminar sobre los cuerpos colgados, además de la ubicación de una camioneta a un lado del puente. Pero ha sido este lunes en la mañana, cuando la Fiscalía General del Estado ha dado más detalles.

“En el lugar de los hechos, sobre el puente, fueron localizados cuatro cuerpos decapitados, así como una bolsa que contenía cinco extremidades cefálicas”, ha mencionado la dependencia, en un breve informe compartido a la prensa. “Al interior de una camioneta, se localizaron quince cuerpos completos y un cuerpo decapitado. Todas las víctimas son del sexo masculino y presentan indicios de heridas por proyectil de arma de fuego”, ha agregado.

Las autoridades han encontrado mensajes en una lona amarrada a la camioneta, y también en pintadas en el chasis del vehículo. En el texto, los autores parecen señalar que el ataque fue perpetrado por parte de una de las facciones en pugna, la que controla Ismael Zambada Sicairos, alias “Mayito Flaco”, hijo de Ismael Mayo Zambada. El mensaje critica a los líderes de la facción contraria, los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán, Iván y Alfredo Guzmán Salazar, conocidos popularmente como Los Chapitos.

Ninguno de los hombres asesinados ha sido identificado, solo se sabe de la atribución de la organización criminal. El hallazgo ocurrió después de una serie de bloqueos el domingo en el municipio de Navolato, a unos 40 kilómetros de donde se localizaron sus cadáveres.

El conflicto entre ambas facciones comenzó a principios de septiembre, semanas después de que el Mayo Zambada fuera aparentemente secuestrado por Joaquín Guzmán López, otro de los hijos del Chapo, para ser llevado a Estados Unidos, donde ahora está siendo juzgado por trasiego de drogas y asesinatos en ese país. Esa es al menos la hipótesis de la Fiscalía General de la República.

Los cuerpos de las 20 personas asesinadas recuerda al hallazgo de otras seis, abandonadas dentro de una camioneta blanca en el fraccionamiento Alturas del Sur, en Culiacán, a finales de septiembre. En aquel vehículo, las autoridades encontraron igualmente un mensaje en el que se leía “Bienvenidos a Culiacán”. El saludo parecía apuntar al expresidente Andrés Manuel López Obrador, que tenía planeada una última visita a Sinaloa, acompañado de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum.

El cierre de ese mes ilumina la violencia que vive estos días la capital de Sinaloa, situación que se ha extendido a buena parte de los municipio del Estado y se ha extendido a Baja California y Sonora, donde el cartel tiene presencia e influencia con negocios ilícitos, como la producción y trasiego de armas y drogas, sobre todo fentanilo.

La violencia ha afectado a toda la población. Al menos 47 niñas, niños y adolescentes han muerto en refriegas desde el inicio de las hostilidades, en septiembre, además de 28 mujeres y casi 40 policías. En estos meses, más de 1,700 personas han desaparecido. La violencia ha sido además un factor determinante en una caída económica histórica en la región.

Cortesía de El País



Dejanos un comentario: