Una hora después de que una oleada de misiles rusos golpeara con dureza Kiev, las sirenas de las ambulancias y los equipos de emergencia siguen trabajando en el centro de la ciudad para llegar a los lugares de impacto y atender a las víctimas. Según el último balance provisional, al menos nueve personas han muerto en la capital de Ucrania, y otras 33 han resultado heridas, en una de las peores ofensivas que se recuerdan en esta urbe desde el inicio de la invasión a gran escala en febrero de 2022. La ofensiva rusa golpea además el corazón de Ucrania en la víspera de la reunión de la OTAN en Washington en la que se celebrará el 75º aniversario de su creación y en la que se prevé que Kiev obtenga nuevas garantías para la futura adhesión a la Alianza, un paso que rechaza de forma tajante el Kremlin. Los ataques rusos han matado en esta jornada a 20 personas en todo el país.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha calificado el ataque de terrorista y ha cifrado en 40 los misiles que han caído durante las últimas horas sobre el país. A las víctimas mortales de Kiev hay que sumar al menos una decena de muertos en Krivói Rih y otros tres en Prokrovsk, en el este del país.
En este ocasión y pese a los trabajos de los sistemas de defensa antiaérea, los proyectiles rusos han alcanzado y dañado, tanto por dentro como por fuera, el hospital pediátrico Ojmatdi, en la orilla derecha del río Dniéper, a tan solo un par de kilómetros del centro de la urbe. Este centro es uno de los mejores dedicados a la infancia, no solo en Ucrania sino en toda Europa.
Las imágenes que llegan desde el interior del personal que grabó los instantes posteriores al ataque, y las que deja el exterior, con la fachada destrozada y un lateral prácticamente derrumbado son dantescas. Una hilera de decenas de personas voluntarias trabaja junto a los equipos de emergencia para desescombrar la parte más dañada en previsión de que haya gente atrapada.
Según el ministro del Interior ucranio, Igor Klimenko, algunos de los siete muertos que, por el momento, ha causado la ofensiva rusa sobre la capital, se han registrado en el hospital pediátrico. “Este es uno de los peores ataques”, ha manifestado el alcalde de la ciudad, Vitali Klitschko. “Se puede ver: es un hospital infantil”. Klitschko, que se ha trasladado hasta Ojmatdi, ha informado de que los pacientes de este centro han sido trasladados a otras instalaciones públicas.
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Antes del bombardeo de primera hora del lunes, Moscú había atacado con varios misiles las provincias de Yitomir y Cherkasy, en el centro del país, sin causar víctimas mortales ni daños.
[Noticia de última hora. Habrá ampliación en breve.]
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Cortesía de El País
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