De Frente Y Claro

Carlos Aguila Franco

LOS GRAVES RIESGOS PARA MÉXICO POR OCURRENCIAS DE LÓPEZ

Como chivo en cristalería anda López en el escaso mes que le falta para que termine su nefasta administración. Y sus ocurrencias, siguen causándole un enorme daño a México y los que en él vivimos. Para aquellos atarantados que no creyeron que López era una amenaza para México, simplemente dan vergüenza que a estas alturas sigan creyendo en él.

Y sumando más Ocurrencias, mismas que iniciaron el 1 de diciembre del 2018 en que llegó como presidente, sus reformas que está obsesionado en que se aprueben, teniendo como cómplices a sus lacayos senadorcillos y diputadetes, que, empinados siempre, tal parece que no levantan los ojos para ver el panorama que le espera al país por seguir siendo los empleadillos de López aprobando todo lo que les ordena.

Ante esas reformas que quieren aprobar al vapor, lo que no analizan los legisladores lacayos de López, porque para eso hay que pensar, es que resulta que, de llevarse a cabo un cambio en el grado de inversión de México, aumentaría las tasas de interés, inhibiría las inversiones en el País y reduciría el espacio fiscal, advirtieron especialistas.

Lo que representaría un enorme riesgo para México, de que le recorten la calificación crediticia, ante un mayor déficit público, que es ocasionado por la continuidad del gasto del Gobierno en programas sociales, la elevada deuda y la perspectiva de un menor crecimiento económico, todo ello sería el efecto de las reformas en el Congreso.

OPINAN LOS EXPERTOS

Bajo ese clima de lo que puede suceder en el país, de las tres grandes calificadoras, Fitch Ratings tiene a México apenas un escalón dentro del grado de inversión, por lo que una baja de ésta degradaría al País a grado especulativo. Asimismo, S&P y Moody´s, tienen al Gobierno federal dos grados adentro.

En ese tenor, el economista Jorge Chávez Presa, señaló que alcanzar el grado de inversión significó para México ser considerado como un País organizado para crecer económicamente, confiable y con capacidad de pago.

Advirtiendo que perder el grado de inversión implicaría tener que incorporar a las tasas de interés una prima de riesgo, lo que generaría un incremento, mucha más cautela en los inversionistas, y una reducción en los proyectos que llegarían a México.

Si suben las tasas de interés significaría que el Gobierno va a pagar más intereses por la deuda que tiene interna y externa, y eso va a reducir el espacio fiscal para financiar y cubrir con el presupuesto o con los ingresos que quedan, a menos que se endeuden más.

Por su parte, Víctor Manuel Herrera, presidente del Comité de Estudios Económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF). Aseveró que va a haber menos presupuesto en medicinas, porque va a tener que pagar más intereses y, especialmente, hay el compromiso de reducir el déficit. Agregando que un primer efecto de perder el grado de inversión es el encarecimiento del financiamiento, con altas tasas de interés.

Para todos los mexicanos, Gobierno, empresas y trabajadores, tener o no el grado de inversión es la diferencia entre tener créditos a tasa fija a plazos de 30 años o créditos a 5 años con tasa variable, como era en los años 80 y 90. Considerando que el elevado déficit del Gobierno, mayor gasto que ingreso, ya no es compatible con la calificación que tiene la deuda soberana gubernamental. De 2018 a la fecha, el déficit público pasó de 2.1 por ciento a 5.9 en la actualidad y aunque Hacienda señala que lo bajará a 3 en 2025 muchos dudan de la meta.

Por otra parte, Luis de La Calle Pardo, ex funcionario de la Secretaría de Economía, externó que si recortaran toda la inversión pública no les alcanzaría para bajar el déficit a 3 por ciento, tendrían que hacer recortes en el gasto corriente o en programas sociales.

De igual manera Mariana Campos, directora de México Evalúa, señaló que otro elemento que impactaría en el grado de inversión es el paquete de reformas al Poder Judicial y la desaparición de organismos autónomos, coincidiendo en que la erosión de la calificación del soberano impactaría el costo del endeudamiento y las inversiones.

LA POSICIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS Y CANADÁ

Y sumándose a lo anterior y respecto a la Reforma Judicial propuesta por López, que ha llevado a entrar en un conflicto con los Estados Unidos, al defender López su reforma de las críticas de calificadoras y gobiernos extranjeros, la Embajada de Estados Unidos respondió a la otra Ocurrencia de López de declarar una pausa con el gobierno norteamericano, al exhibir una carta en la que subrayaron su apoyo a la reforma al Poder Judicial.

Ocasionando con ello que la administración de Joe Biden remarcara que la iniciativa, aprobada por la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados, no aborda los problemas dentro del Poder Judicial. Esto a través de una carta enviada a la Secretaría de Relaciones Exteriores el viernes 23 de agosto del 2024, donde se señala:

“Como lo expresó el Embajador Salazar, Estados Unidos apoya el concepto de reforma judicial en México, pero nos preocupa mucho que la elección popular de jueces no aborde la corrupción judicial ni fortalezca el poder judicial del Gobierno de México”.

Destacando su máximo respeto a la soberanía de México y que apoya la búsqueda de un Poder Judicial independiente, autónomo y legal en nuestro país. Al mismo tiempo, señala, mientras trabajamos de manera conjunta como socios para hacer realidad la integración económica de América del Norte y abordar los desafíos de seguridad compartidos que afectan directamente a nuestros dos pueblos. Es del interés de Estados Unidos identificar los acontecimientos que limitarían innecesariamente nuestra capacidad para alcanzar esos objetivos juntos.

Todo ello derivado del enojo de López en contra de la Embajada de EU, al declarar que habría una ‘pausa’ en la relación con los diplomáticos estadounidenses, afirmando en la ‘mañanera’ de este 27 de agosto del 2024:

“Ellos quisieran tener injerencia en asuntos que solo corresponden a los mexicanos, la relación continua, pero ojalá haya de parte de ellos una ratificación de que van a ser respetuosos de la independencia de México, de la soberanía de nuestro país”.

Pero no todo quedó ahí en el pleito con los Estados Unidos, sino que López aclaró que la pausa también aplica para Canadá, esto después de que Graeme Clark, embajador de ese país en México, dijo que la reforma al Poder Judicial preocupa a los capitales canadienses. Advirtiendo su embajador el 22 de del 2024:

“Vamos a tener unos cambios constitucionales, como embajador, es difícil para mí hablar públicamente sobre estos temas, pero lo que sí puedo decir es que mis inversionistas sí están preocupados. Ellos quieren estabilidad, quieren un Sistema Judicial que funcione si hay problemas”.

Todo lo anterior debido a las ocurrencias de López, que, importándole un cacahuate partido por la mitad, que, al querer aprobarlas, esas reformas contengan leyes que afectan a inversiones existentes gracias al T-MEC y con ello se desestime la llegada de nuevos capitales.

Y vuelvo a insistir en que si los legisladores que está en sus manos aprobar o no esas reformas, piensan que a ellos y sus familias no les afectara lo que López está obsesionado en hacer, y simplemente sin analizar, pensar, levantaran la mano para decir SI PATRÓN. Muy grave porque ellos serán al igual que López y Sheinbaum, culpables de lo que a México y sus más de 130 millones de habitantes nos afecte.



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