El exgobernador de Veracruz Miguel Ángel Yunes Linares juró como nuevo senador en lugar de su hijo, Miguel Ángel Yunes Márquez, luego de que éste pidiera licencia por “motivos de salud” horas antes de que se vote la reforma judicial que impulsa la 4T. “El voto es libre. No soy cobarde ni traidor”, aseguró el flamante legislador.
“No hubo ninguna negociación con el gobierno. No hemos negociado absolutamente nada, pero nadie nos va a obligar a votar excepto nuestra certeza”, aseguró el exgobernador y denunció un “linchamiento” por parte del presidente del PAN, Marko Cortés, quien lo acusó de ser un “traidor a la patria”. “El voto es individiual, el voto es libre. No soy traidor por no estar con ustedes”, sostuvo Yunes Linares antes de sentarse junto a la bancada guinda.
A raíz de esto, Marko Cortés denunció un “pacto de impunidad” entre Morena y la familia Yunes Márquez para que el exgobernador vote a favor de la reforma judicial. “Nadie puede creer que no hubo una presión indebida del gobierno contra la familia. ¿No lo impugnó Morena para que no pueda ser senador?”, recordó y anticipó que en los próximos días otro hijo de Yunes Linares, Fernando Yunes Márquez, podría asumir como diputado local de Veracruz a pesar de la orden de aprehensión que pesa en su contra.
El voto de la familia Yunes Márquez es fundamental para la 4T, que, de esta forma, se encamina a aprobar la reforma judicial que impulsa Andrés Manuel López Obrador con 86 votos. Según el escenario actual, el oficialismo recibiría los dos apoyos ya confirmados del PRD y uno más de una de las familias más poderosas de Veracruz. “Traidor es el que va en contra de sus principios y nosotros no vamos en contra de nuestros principios. Vamos a seguir en esta batalla”, agregó el exgobernador.
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Cortesía de La Política Online
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