Fueron semanas complicadas para el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha. La guerra abierta entre los hijos del Mayo Zambada -detenido un par de meses atrás- y los hijos del Chapo -presuntamente responsable de haber entregado al máximo capo de la historia de México a las autoridades de Estados Unidos- no cesa. Y su continuidad en el gobierno estatal es puesta en duda por muchos actores cercanos al gobierno de Claudia Sheinbaum.
Como adelantó LPO, son varios los generales de la Sedena quieren que el cambio sea cuanto antes porque se entiende la salida de Rocha como un primer paso para pacificar la entidad. Tampoco es menor la posición de la Fiscalía que comanda Gertz, porque el fiscal ya está convencido de que Rocha realizó un montaje en lo referido a la ejecución de Héctor Melesio Cuén, quien habría estado en la reunión con el capo y con Rocha, de acuerdo con la versión de Zambada.
Envuelto en esta crisis, Rubén Rocha viajó a la Ciudad de México para recibir el respaldo de los legisladores de Morena tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados. Primero estuvo en el Senado, donde evitó a la prensa y fue recibido por Adán Augusto López.
Según comentan algunos senadores, durante el encuentro privado el gobernador Sinaloa les pidió apoyo a los senadores y negó que él tuviera algún tipo de contacto o vinculación con los grupos de narcotráfico. “Confíen en mí”, les pidió.De allí se trasladó a San Lázaro, donde lo esperaba Ricardo Monreal. Intentó también esquivar a la prensa, pero surgió un evento inesperado: el elevador donde viajaba con el líder de Morena en Diputados se quedó atorado. Eso permitió que la prensa los encontrara.”Estamos viviendo un momento difícil, estamos atendiendo por el bien de las y los sinaloenses esta situación complicada”, declaró Rocha tras el rescate, que tardó más de diez minutos.
Dijo que la crisis de violencia se explica por la guerra “Los Mayitos” y “Los Chapitos” que se desató el 25 de julio, “cuando atrapan a Ismael El Mayo Zambada”. Reconoció además que “no hay una idea clara” de cuándo terminará la violencia en ese estado.
“La presidenta Claudia Sheinbaum ha seguido apoyando de manera importante, nosotros no podríamos como gobierno estatal resistir a esos embates entre los grupos sólo con la policía preventiva del estado y la ministerial. Hemos estado enfrentando el problema, pero no tenemos todavía una clara idea de cuándo va a terminar, seguimos en la contienda las autoridades enfrentando la situación”, concluyó.
Cortesía de La Política Online
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