El mundo digital ha abierto nuevas oportunidades, pero también ha aumentado los riesgos de ser víctima de fraudes financieros en internet. La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) advierte sobre este problema, ya que estos delitos buscan sustraer información confidencial o manipular a los usuarios para obtener su patrimonio.
Aquí en Unotv.com te explicamos los fraudes financieros más comunes y las formas de protegerte.
Según la Condusef, el 67% de las personas usuarias de Internet teme ser víctima de un fraude financiero. Este riesgo se incrementa con la tendencia creciente del comercio en línea y el uso de plataformas digitales, donde los delincuentes emplean estrategias cada vez más sofisticadas para aprovecharse de los usuarios.
Tipos de fraudes financieros o estafas
De acuerdo con la institución especializada, se puede dividir los fraudes financieros de la siguiente manera:
- Acceso no autorizado a información financiera
Este tipo de fraude ocurre cuando los ciberdelincuentes logran acceder a los números de tarjetas de crédito o débito para realizar compras en línea sin la autorización de la persona propietaria. Los estafadores suelen obtener estos datos a través de sitios falsos, correos engañosos o, en algunos casos, mediante la clonación de tarjetas en puntos de venta físicos. El daño puede ir desde compras no reconocidas hasta el agotamiento de los fondos de una cuenta.
- Robo de identidad
El robo de identidad es uno de los fraudes más graves y consiste en la obtención de suficiente información personal y financiera de una persona para asumir su identidad. Con esta información, los delincuentes pueden solicitar créditos, hacer transferencias y realizar compras a nombre de la víctima. Este tipo de fraude puede afectar profundamente el historial crediticio y la reputación financiera de la persona afectada, generando grandes deudas que no le corresponden.
- Fraudes financieros de manipulación psicológica
También conocido como ingeniería social, este tipo de estafa busca obtener información confidencial o acceso a sistemas a través de situaciones de confianza ficticias. Las técnicas más comunes son:
- Phishing: Correos electrónicos que parecen oficiales, pero redirigen a sitios fraudulentos.
- Smishing: Mensajes de texto que inducen a la persona a compartir sus datos.
- Vishing: Llamadas telefónicas con identidades falsas para obtener información sensible.
- Pharming: Creación de sitios web falsos que imitan portales bancarios u otros servicios.
- Transferencias electrónicas fraudulentas
En este fraude, los delincuentes solicitan apartados o pagos iniciales mediante transferencias electrónicas, ofreciendo productos o servicios a precios irrealmente bajos. Una vez recibido el dinero, los estafadores desaparecen, dejando a la persona afectada sin el producto ni posibilidad de recuperar su dinero.
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- Anuncios engañosos
Los ciberdelincuentes también suelen aprovechar el interés por promociones, descuentos y ofertas atractivas para realizar estafas. A través de anuncios fraudulentos, inducen a las personas a ingresar sus datos personales o financieros, o bien a comprar productos inexistentes o de baja calidad. Este tipo de fraude es común en redes sociales y sitios de anuncios clasificados.
- Fraudes de financiamiento crediticio
Se trata de estafas en las que se ofrecen préstamos sin muchos requisitos a través de redes sociales, aplicaciones o sitios falsos. Atraen a las personas con tasas bajas y pagos inmediatos, pero imponen condiciones abusivas como intereses excesivos o, incluso, prácticas de intimidación y extorsión para el cobro. En muchos casos, estos préstamos resultan ser completamente ficticios.
Recomendaciones para evitar fraudes financieros
Para evitar ser víctima de estos fraudes financieros, es fundamental seguir algunas recomendaciones de seguridad:
- No compartas tu tarjeta de crédito o débito con nadie, y asegúrate de mantenerla siempre bajo tu control.
- Antes de realizar una compra en línea o ingresar datos personales en Internet, verifica que el sitio sea auténtico y que cuente con medidas de seguridad como el protocolo HTTPS.
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- Evita abrir enlaces sospechosos o con ofertas tentadoras; y si estás interesado en una oferta, accede directamente al sitio oficial de la tienda para confirmar la veracidad de la promoción.
- Destruye los documentos que ya no necesites y que contengan información personal o financiera, ya que estos podrían caer en manos equivocadas.
- Evita proporcionar información personal o financiera en llamadas telefónicas, correos electrónicos o mensajes de texto.
- Mantén actualizados el sistema operativo y el antivirus de tus dispositivos electrónicos para protegerlos de posibles amenazas y fraudes digitales.
- Desconfía de los préstamos rápidos y fáciles que soliciten tus datos financieros o personales, ya que podrían ser una forma de robar tu información y poner en riesgo tu patrimonio.
Siguiendo estas recomendaciones, podrás protegerte de los fraudes financieros y utilizar las plataformas digitales de manera segura.
Cortesía de UNO TV
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