El presidente electo Donald Trump prometió que, a partir de su asunción el 20 de enero, Estados Unidos ingresará en un “nueva era de paz, prosperidad y grandeza nacional” en la que no habrá consideración para algunos sectores de la población. “Vamos a detener la locura transgénero”, afirmó este fin de semana en un acto con jóvenes de la derecha; mientras que en una entrevista a la revista Time aseguró que el debate sobre qué baños debían usar las personas transgénero “ha destrozado a Estados Unidos”.
A un mes de su asunción, Trump continuó con su tono de campaña, cuando invirtió en anuncios televisivos donde criticaba a la candidata demócrata Kamala Harris, acusándola de supuestos financiamientos de cirugías de afirmación de género con impuestos públicos, que el republicano prometió utilizar para deportar migrantes detenidos. “Kamala está con ellos/ellas. El presidente Trump está con ustedes”, decía el spot durante la campaña.
El presidente electo reflotó el tema en un acto con jóvenes republicanos a Phoenix, Texas, a quienes les prometió terminar con un debate fogoneado por la derecha internacional respecto de la participación de personas transgénero en las competencias deportivas, como en el caso de la boxeaora argelina Imane Khelif, sobre quien se montó una fake news para agitar el tema.
“Será política oficial del gobierno de los Estados Unidos que sólo haya dos géneros, masculino y femenino”, aseguró Trump a los asistentes al AmericaFest, en Texas; y continuó: “Firmaré órdenes ejecutivas para acabar con la mutilación sexual infantil, sacar a los transgénero del Ejército y de nuestras escuelas primarias y secundarias”. Esa cruzada contra las personas transgénero también cala hondo en el magnate, aliado y futuro integrante de la gestión trumpita Elon Musk, por la historia personal con su hija.
En los últimos años, los estados controlados por demócratas y republicanos se movieron en direcciones opuestas en políticas transgénero como el tratamiento médico y qué libros sobre el tema están permitidos en las bibliotecas públicas o escolares. Debate que también se cristalizó en cuestiones tan privadas como el uso del baño.
La representante republicana de Carolina del Sur, Nancy Mace, presentó en noviembre una resolución que modificaría las reglas de la Cámara de Representantes para prohibir que las mujeres transgénero usen los baños de mujeres en el Capitolio. Justo cuando Sarah McBride (Partido Demócrata), primera persona trans en llegar al Congreso, llegará a ocupar una banca.
Entrevistado por la revista Time –que decidió elegir a Trump com Personaje del 2024–, el presidente electo coincidió con McBride, al sostener que la esfera política debe centrarse en otra cosas “más importantes”, pero dejó clara su posición respecto a las políticas de género: “No quiero entrar en el tema de los baños (trans). Porque estamos hablando de un número muy pequeño de personas y esto ha destrozado nuestro país. Así que se tendrá que resolver con lo que la ley acuerde”.
“En 2016, usted dijo que las personas transgénero podían usar el baño que quisieran ¿Todavía piensa así?”, quisieron profundizar desde el Time en la entrevista con Trump. “¿Cuándo fue eso?”, evitó responder el presidente electo, quien tampoco precisó si abolirá o no el Título IX –una ley federal que garantiza a estudiantes de ambos sexos los mismos derechos– para alumnos transexuales: “Voy a analizarlo profundamente”, zanjó.
En Estados Unidos, según una investigación del Instituto Williams (Universidad de California, UCLA) hecha en 2022, había alrededor de 300 mil personas transgénero solo entre les jóvenes de 13 y 17 años (1,76 por ciento del total).
La vuelta de Trump ya impacta en la producción cultural de Disney
El estudio Pixar que prepara su primera serie de larga duración llamada ‘Win of Lose’, prevista para debutar en febrero de 2025, eliminó de la trama la historia de una mujer transgénero, al considerar que “muchos padres preferirían discutir ciertos temas con sus hijos en sus propios términos”.
“Cuando se trata de contenido animado para un público más joven, reconocemos que muchos padres preferirían discutir ciertos temas con sus hijos en sus propios términos”, precisó un portavoz Disney, en declaraciones a la revista especializada The Hollywood Reporter publicadas este martes.
El personaje en cuestión seguirá participando en la serie, pero se eliminarán algunas líneas de diálogo que hacían referencia a la identidad de género. El coloso del entretenimiento ya había recibido críticas en relación a algunos personajes LGTBIQ+, como que ha presentado en proyectos de animación internacionales como la película ‘Lightyear’ –un spin off de Toy Story–, en el que se mostraba a una pareja de lesbianas dándose un beso, conviviendo y criando a su hijo.
Cárteles “terroristas”
En su discurso en el AmericaFest de Texas, Trump recuperó también una promesa incumplida de su primer mandato: “Vamos calificar a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas extranjeras. Vamos a hacerlo inmediatamente”. Esa iniciativa había formado parte de su primer gobierno, pero la archivó a pedido del entonces presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien aceptó cooperar en seguridad. En paralelo, Trump reiteró que lanzará “la mayor operación de deportación (de migrantes) en la historia de los Estados Unidos”.
La sucesora de López Obrador y presidenta de México, Claudia Sheinbaum, también rechaza la posibilidad de que las mafias mexicanas sean designadas como terroristas bajo el argumento de evitar una incursión extranjera que atente contra la soberanía del país.
“Nosotros colaboramos, coordinamos, trabajamos juntos, pero nunca nos vamos a subordinar. México es un país libre, soberano, independiente y no aceptamos injerencismos en nuestro país”, advirtió Sheinbaum este domingo durante una visita al estado de Sinaloa, que sufre una escalada de violencia criminal desde septiembre.
Cortesía de Página 12
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