Sistemas de aire acondicionado tenemos muchos. Pero, como en casi cualquier caso, tiene limitaciones y contras, por lo cual se buscan alternativas. Uno de los “peros” más grandes del sistema de aire acondicionado es el precio, ya que se gasta mucho en el dispositivo y luego, mes con mes, en energía eléctrica o gas.
Por suerte, ya tenemos una alternativa al aire acondicionado, con la capacidad de climatizar tu casa, reduciendo la factura de luz y sin destruir tu pared. Se trata del techo radiante, un avance tecnológico que está llamando la atención de las personas.
Qué es el techo radiante y cómo funciona
Cuando hablamos de techo radiante, nos referimos a un sistema de climatización que se basa en la instalación de tuberías o paneles radiantes en el techo de un edificio, una casa o un departamento. Estos elementos están pensados en emitir calor o frío de forma uniforme, creando así un ambiente confortable en el interior de la vivienda.
A diferencia de los sistemas convencionales que utilizan radiadores o aire acondicionado, el techo radiante aprovecha la radiación térmica para calentar o enfriar el espacio de manera más eficiente.
La forma en que funciona el techo radiante es a través de la circulación de agua caliente o fría en la red de tuberías instaladas en el techo. Estos tubos están conectados a un sistema de calefacción que regula la temperatura del agua según las necesidades del usuario.
Cuando el sistema se utiliza para calefacción, el agua caliente circula por las tuberías, calentando el techo y, por ende, irradiando calor hacia abajo; por el contrario, para el modo de refrigeración, el agua fría circula por las tuberías, absorbiendo el calor del ambiente y enfriando el espacio de manera uniforme. Este proceso de transferencia térmica es altamente eficiente y reduce el consumo energético comparado con los sistemas de aire forzado.
Beneficios del techo radiante
Este sistema tiene algunas ventajas, respecto a otras soluciones de climatización, entre las que se encuentran:
- Eficiencia energética: Los techos radiantes son más eficientes que los sistemas de aire acondicionado, ya que requieren menos energía para mantener una temperatura confortable. La transferencia de calor por radiación minimiza las pérdidas energéticas y optimiza el uso del calor o frío generado.
- Clima parejo: Su sistema distribuye el calor o frío de manera uniforme. Los techos radiantes eliminan los puntos calientes o fríos que son comunes en otros sistemas de climatización, es decir, un confort térmico mejorado.
- Silencioso: A diferencia de los aires condicionados que utilizan ventiladores o compresores, el techo radiante es completamente silencioso. Además, no requiere conductos ni equipos visibles, manteniendo una estética limpia y moderna.
Algo que es importante mencionar es que se requieres de un equipo experto para la instalación de este tipo de techos radiantes. Asimismo, cualquier arreglo o defecto, tienes que solucionarlo con quien te lo haya instalado.
Cortesía de Xataka
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