A casi 12 años de haber emitido su episodio final, Breaking Bad aún se considera como una de las mejores series de todos los tiempos. El programa cosechó tanto éxito que su creador, Vince Gilligan, extendió su universo con dos spin-offs: El Camino y Better Call Saul.
Cada una de las entregas de la franquicia mantuvo el mismo nivel de drama y calidad narrativa que cautivaron a los espectadores durante años. No obstante, si bien podemos decir que dentro de dichas producciones se mantuvo una meticulosa y muy cuidada atención al detalle, existe un error básico.
A través de una entrevista para Variety, en conmemoración al décimo aniversario del final de Breaking Bad, Gilligan platicó acerca de su sentir sobre cómo terminó la serie. A pesar de estar orgulloso del esfuerzo de los escritores y el equipo en general, aceptó que se tuvo un error muy básico a lo largo de las temporadas: los dientes de Aaron Paul.
“Creo que lo único en lo que nos equivocamos fue en los dientes de Aaron Paul. ¡Son demasiado perfectos! Para un tipo al que le dieron tantas palizas y que fumó tanta metanfetamina, sus dientes no se verían tan bonitos”.
Vince Gilligan para Variety.
Vale la pena mencionar que, dentro de dichos detalles, los efectos por consumir metanfetamina de manera prolongada se reflejan en trastornos psicológicos como ansiedad, paranoia, insomnio hasta alucinaciones. Pero sin duda, otro rasgo de su uso son las caries, pérdida de dientes y daños en las encías.
“Probablemente le hicimos un flaco favor al país, pero dicho esto, Aaron es agradable a la vista, así que eso fue bueno para la gente que lo estaba viendo”.
Al final, el personaje de Jesse Pinkman se volvió enigmático y una pieza fundamental dentro de la trama. Y esto fue por pura epifanía. Cabe recordar que el personaje de Paul tuvo un plan muy distinto a lo que vimos en pantalla. En un inicio, Gilligan pensó en matar al personaje, pero gracias a la huelga de guionistas de 2008 pudimos disfrutar de la interpretación de Aaron por muchos años más.
Con todo y estos detalles, los dientes de Pinkman quedan más como una anécdota que los fanáticos más acérrimos podemos pasar por alto. Cuando una historia tan llena de intriga nos hace mordernos las uñas, unos dientes pueden quedar en segundo plano dentro de la trama.
Te recordamos que para disfrutar del universo de Breaking Bad, puedes disfrutarlo en exclusiva por Netflix.
Cortesía de Xataka
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