Cosas odiosas en la vida: un mosquito volando sobre tu cabeza justo antes de dormir, la comida pegada a tus platos y que no puedes despegar por más que telles y, sobre todo, las descomposturas de la tubería de tu casa. Estas últimas son especialmente molestas porque ensucian todo a su paso, y si no las arreglas rápido podrías dañar otras cosas de tu hogar y, por supuesto, tienes que quedarte sin agua por varios momentos.
Por suerte, existen maneras de solucionar este dilema, una de estas maneras es a través de herramientas duraderas para las tuberías que no solo ayudan a evitar fugas, sino que también previenen los malos olores. Una de estas se le conoce como céspol por trampa y aunque quizá no sepas qué son, son más comunes en casa de lo que imaginas.
Qué es un céspol y para qué funciona
El céspol es un dispositivo de plomería que se instala bajo lavabos, fregaderos y otros lugares donde se requiere drenaje de agua. En otras palabras, es el tubo blanco que vemos debajo del lavabo del baño. Su razón de existir es para permitir que el agua fluya hacia el sistema de alcantarillado mientras evita que los gases y olores desagradables regresen a la vivienda. Además, facilita la recuperación de objetos pequeños que puedan caer accidentalmente en el drenaje, como anillos o aretes, evitando así que se pierdan en el sistema de alcantarillado.
Para funcionar correctamente, el céspol actúa como una especie de válvula o barrera de agua en forma de “U” que se encuentra en la tubería de desagüe. El agua acumulada en el fondo de este producto actúa como sello hidráulico, evitando que los gases y olores asciendan por la tubería y salgan a través del desagüe.
Céspol con trampa para los malos olores
Si de por sí una de las funciones del céspol es evitar los malos olores, los modelos con trampa son una solución eficiente y duradera para el desagüe de lavabos y fregaderos. Su diseño está enfocado en evitar malos olores y garantizar un flujo de agua sin obstrucciones. Este cespol es ideal para instalaciones en hogares y comercios. Su diseño con registro permite un fácil acceso para la limpieza y el mantenimiento, asegurando un funcionamiento óptimo y prolongado.
La clave de esto es su registro integrado, o trampa, que facilita el acceso al interior del céspol para una limpieza o mantenimiento de forma rápida y sencilla, lo que ayuda a prevenir atascos y asegurar un rendimiento continuo sin interrupciones. Eso sí, debes vaciar constantemente esta canastilla para darle un correcto mantenimiento, . De lo contrario, los olores volverán a salir.
Cortesía de Xataka
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