Dos grandes estrellas del cine. En primer lugar tenemos al icónico Tom Cruise reconocido por sus acrobacias a lo largo de la saga Misión: imposible, o bien su escena en ropa interior con el tema Old time Rock & Roll de fondo. Por otro lado, se encuentra uno de los mejores directores de los últimos tiempos, creador de obras que tienen lo mismo de distintas que de profundas. En esta ocasión, hablaremos de la cinta que juntó a ambos.
El presentador de un concurso de televisión, dos niños prodigios, un moribundo, su mujer, su hijo perdido y su enfermero. Todos y cada uno viven en el Valle de San Fernando, Los Ángeles. Nueve historias aparentemente independientes convergen entre sí durante un día a través de su búsqueda del amor, el perdón y sus propios sentimientos. Esto es: Magnolia.
Estrenada en 1999, esta obra tal vez no sea de las mejores calificadas de Cruise, pero al menos sí se posiciona como una de sus mejores interpretaciones. Bajo la dirección de Paul Thomas Anderson, se le puede ver en una faceta totalmente distinta a lo hecho por el actor durante aquellos años, pero que deja un buen sabor de boca al estar rodeado de un reparto lleno de estrellas.
John C. Reilly, Philip Baker Hall, Julianne Moore, William H. Macy, Jason Robards, y hasta a quien se le puede considerar el actor fetiche del cineasta, Philip Seymour Hoffman. En compañía de un elenco de primera, la cinta nos muestra un mosaico de la sociedad contemporánea con la estructura de un rompecabezas. Durante poco más de tres horas, estamos frente a una ola de miedo, desesperación, dolor y esperanza.
Todo lo anterior da como resultado un filme que fue galardonado en el Festival de Cine de Berlín, se llevó un Globo de Oro, así como tres nominaciones al premio Oscar, uno de ellos para Cruise como Actor de Reparto, y hasta un Grammy. Evidentemente, la crítica elogió el proyecto, y a la fecha tiene reseñas positivas en diversos portales de cine. Algunas reseñas que se pueden leer mencionan:
“Magnolia es operística en su ambición, un gran y jubiloso salto hacia el melodrama y la coincidencia, con emociones desbordadas, crímenes y castigos, todo acompañado por una música insistente“.
“Magnolia es una bella y desmedida película coral. Más de tres horas de cine intimista que al final se rompe en una extraña metáfora apocalíptica”.
“Puede ser tan embriagadora como la flor que le da nombre, y sus personajes, la mayoría tan defectuosos como fascinantes, parecen embriagados por su aroma abrumador”.
Entre otras opiniones, también podemos mencionar lo escrito por la revista Fotogramas que la cataloga como “una compleja arquitectura narrativa en la que el concepto de secuencia ha sido reinventado”; o bien lo dicho por el sitio Sensacine donde expone cómo la cinta “trata sobre lo imprevisible en un país muy imprevisible“.
A palabras de su servidor, Magnolia no solo presenta a un actor reconocido por sus blockbusters y su reto para presentarse como un artista hecho y derecho, sino una exploración a la complejidad del sentir humano. Desde lo excéntrico hasta lo intrínseco de los personajes, hace navegar al espectador en decenas de emociones. A ello se le suma una escena surreal donde aparecen ranas caídas del cielo.
Si gustas disfrutar de este complejo, enredado pero único drama, puedes encontrar Magnolia a través de Max.
Cortesía de Xataka
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