Bolivia: transportistas amenazan con una huelga contra Arce

La escasez de combustible en Bolivia alienta las protestas de los transportistas contra el presidente Luis Arce. Los sindicatos amenazan con una huelga, según informó el diario El País, y hay cortes de ruta, mientras que el mandatario anunció una decena de medidas para enfrentar la crisis, que se ha agravado en las últimas semanas.

“Bolivia no está quebrada (…), tiene una economía que sigue generando inversión pública”, explicó el mandatario boliviano durante un mensaje televisado, rodeado por sus ministros. Las medidas están orientadas a combatir la falta de carburantes en el país altiplánico, donde en los últimos días se han vuelto a ver largas filas de vehículos en las estaciones de servicio. 

Entre las acciones anunciadas por Arce están la reducción del uso de los vehículos estatales, la instalación de clases virtuales, cambios de horarios para funcionarios públicos y la priorización de distribución de combustibles entre el sector agropecuario, que teme perder sus cosechas. También anunció mayores controles militares en fronteras y puntos de distribución para evitar el contrabando y el mercado negro, así como un incremento de los volúmenes de suministro en las estaciones de servicio. “El problema que hoy enfrenta nuestro país es muy simple, es la falta de liquidez de dólares transitoria”, agregó Arce.

Bolivia atraviesa una crisis económica por escasez de la moneda estadounidense. Durante años hizo uso de sus reservas líquidas para importar nafta y diésel que compra a precio internacional y distribuye a valor subsidiado en el mercado interno. Los recursos están casi agotados. Durante su mensaje, Arce instó una vez más al Parlamento boliviano a aprobar créditos que ha solicitado por 1.600 millones de dólares. “No estamos pidiendo limosna. No estamos pidiendo más que los créditos que el Estado puede pagar”, advirtió.

El mandatario, de 61 años, descartó implementar propuestas de algunos sectores como la devaluación de la moneda o eliminar la subvención de carburantes. Ante las voces de gremios y políticos que pidieron su renuncia en los últimos días, el líder del oficialismo señaló que no lo hará. “No vamos a renunciar”, expresó.

Mientras tanto, según informó la radio boliviana Panamericana, hay bloqueos de rutas en distintos puntos del país y exigencias de renuncia de autoridades aduaneras. El 60 por ciento del transporte no opera por la falta de combustible, afectando la distribución de alimentos y servicios esenciales.

A su vez, ciudadanos de Santa Cruz, la mayor región y el motor económico de Bolivia, protestaron el jueves: mujeres marcharon con cacerolas vacías en el centro de la ciudad, mientras que los hombres llevaban en las manos la bandera boliviana. “Santa Cruz y Bolivia viven días de angustia, de zozobra, nuestras familias está demostrando que no hay qué echarle a la olla, no podemos ya mantener a nuestros hogares, a nuestras familias”, dijo a la agencia EFE el presidente de la Federación Departamental de Juntas de Vecinos de Santa Cruz, Omar Rivera. “La angustia es grande y el futuro es incierto, es por eso que salimos a las calles”, añadió Rivera.

Cortesía de Página 12



Dejanos un comentario: