Fuente de la imagen, BBC/Benjamin Begley
- Autor, Stephen McDonell
- Título del autor, BBC, corresponsal en China
Pekín insiste en que se mantendrá firme ante los aranceles de Donald Trump a los productos chinos.
Ha intentado asegurarle a todos que el país es fuerte y que su economía es lo suficientemente resiliente como para capear esta nueva tormenta.
Pero esta semana, los funcionarios chinos han reconocido el potencial sufrimiento económico que puede suponer la actual guerra comercial con Estados Unidos.
Una opción para los responsables de las políticas en este caso es tratar de aumentar el consumo interno para compensar la pérdida de ingresos por exportaciones.
China tiene una población enorme y si su gente empieza a comprar más cosas las empresas chinas no tendrán que depender tanto del comercio exterior.
Un objetivo clave en este esfuerzo son los jubilados con potencialmente décadas de ahorros.
Ahora el gobierno quiere que gasten parte de ese dinero, por el bien del país.
Y eso es precisamente lo que buscan iniciativas como los “trenes plateados”, diseñados específicamente para viajeros mayores.
A bordo del Star Express, se sirven cócteles y los micrófonos de karaoke pasan de mano en mano, mientras los jubilados festejan, en su viaje por la provincia de Yunnan, en el suroeste de China.
El ganso asado se devora con tragos de baijiu, una bebida alcohólica blanca china.
“Hemos trabajado duro durante todos estos años”, dice Daniel Ling, de 66 años, que viaja con un grupo de amigos jubilados o semijubilados.
“Lo importante cuando llegamos a esta edad es saber qué es lo que está bien hacer, y eso es disfrutar realmente de la vida”.
Disfrutar gastando
La iniciativa espera convertir un problema económico en una solución, al brindarles a las personas mayores una forma divertida de gastar más.
Las familias tienden a no gastar lo suficiente porque no se sienten seguras financieramente.
La crisis inmobiliaria ha devaluado su principal activo: la vivienda. Y el creciente desempleo también ha mermado su seguridad laboral.
Si a esto añadimos el envejecimiento de la población y las bajas tasas de natalidad, la proporción de jubilados crece cada año, lo que hace más difícil para la economía sustentarlos.
Pero lo que sí tienen los jubilados es tiempo libre y dinero para gastar.

Fuente de la imagen, BBC/Rachel Yu
Ahora se les darán más oportunidades de derrochar con trenes especiales diseñados para llevarlos a sitios que normalmente no visitarían: partes del país más lejanas que necesitan un estímulo financiero.
“Los principales lugares donde pararán los trenes plateados son zonas rurales subdesarrolladas o pequeñas localidades con economías en dificultades”, afirma el Dr. Huang Huang, investigador asociado de la Academia de Turismo de China que ha estado estudiando el impacto potencial de este plan.
Consumirán diversos productos en los trenes, pero al llegar a una estación, también visitarán atracciones turísticas y pueblos tradicionales.
En Baisha, los viajeros se detienen en los modestos puestos callejeros al pie de antiguas casas de madera de dos pisos construidas por la minoría étnica local Naxi.
Una de ellas se acerca a una vendedora que vende tiras de carne de yak a la parrilla. Se ven deliciosas y compra una bolsa.
El esposo de la vendedora, que también trabaja en el puesto, dice que el negocio solo lleva un año y que necesitan clientes externos para sobrevivir.
A lo largo de esta calle podrás conseguir papas con salsa picante, brochetas de cordero, zumo de naranja natural y la ropa tradicional del pueblo Naxi.
Se trata de una región donde los ingresos son bajos y la mayoría de los jóvenes se marchan cuando llegan a cierta edad porque apenas hay trabajo para ellos.
Tampoco es un lugar de fácil acceso para muchos jubilados, pero estos trenes plateados lo hacen posible, con fácil acceso para subir y bajar, y con personal para ayudar y apoyo médico adicional si es necesario.
Shi Lili, de 69 años, cuya nieta la acompaña, dice que ha reavivado el espíritu viajero de su juventud.
“Cuando era joven, me gustaba mucho explorar otros lugares sola. Ahora que soy mayor, tengo a mi familia que puede acompañarme”.
En beneficio de todos

Fuente de la imagen, BBC/Rachel Yu
A finales del año pasado, el 22% de la población de China tenía más de 60 años, lo que representa más de 310 millones de personas.
Así que, si solo un pequeño porcentaje de los jubilados chinos toma los “trenes plateados”, aún podría significar millones de ventas de billetes.
Y las autoridades ferroviarias chinas afirman que planean operar 100 rutas en los próximos tres años.
Estos viajes por sí solos no solucionarán el enorme problema que enfrenta China con el bajo gasto de consumo. Pero los economistas afirman que estas medidas son un paso en la dirección correcta.
Los ciudadanos de mayor edad ahora tienen un deseo mucho mayor de viajar en comparación con las generaciones anteriores, lo que crea un “enorme potencial”, según el Dr. Huang.
“Dado que el envejecimiento de la población china es ahora una realidad a largo plazo -algo que es poco probable que cambie-, deberíamos aprovechar esta situación para encontrar más oportunidades, en lugar de verla siempre como un desafío”.
De vuelta a bordo del tren, los aventureros plateados están listos para descansar.
Y pueden hacerlo sabiendo que su gran día fue, al menos en parte, para el beneficio de todos.
Así partimos con destino a la siguiente ciudad.

Suscríbete aquí a nuestro nuevo newsletter para recibir cada viernes una selección de nuestro mejor contenido de la semana.
Y recuerda que puedes recibir notificaciones en nuestra app. Descarga la última versión y actívalas.
Cortesía de BBC Noticias
Dejanos un comentario: