La generación Z sigue siendo un dolor de cabeza para las empresas: el 95% rompe las reglas

A medida que los jóvenes de la generación Z entran al campo laboral, parece que las reglas y “etiquetas” de oficina no encajan con su estilo de vida. No tanto por el hecho de no querer trabajar, sino que las actitudes que han adoptado difieren, por mucho, de las normas tradicionales oficinistas.

Tal como arrojan los datos de una encuesta realizada por PapersOwl, el 95% de los jóvenes han roto las reglas de su lugar de trabajo. Entre las actividades de las que se dan el lujo de realizar destacan el utilizar permisos para temas personales, dormir en plena jornada y más específicamente, pasan por encima del horario laboral.

Tal como arrojan los resultados, la mayor regla que suelen romper los Gen Z es salirse antes del trabajo. El 34% de los encuestados aseguró realizar tal práctica. Sumado a ello, la puntualidad tampoco es su fuerte. Al menos un 18% confesó llegar tarde al trabajo sin avisar a su jefe directo.

Pero el hecho de hacerse presente no significa que sea del todo para trabajar. Por un lado, el 11% reconoció tomarse un break para dormir. Por su parte, cuatro de cada diez aceptaron solo hacer acto de presencia, tomar un café e irse trabajar desde otro lugar. El llamado coffee badging.

Aunque tienen un punto a su favor. Según explicaron, no se trata de “flojera” o desinterés, ya que un 66% afirmó que esto lo han realizado para tener mayor flexibilidad durante su jornada laboral, el 44% simplemente prefiere un lugar más cómodo y el 32% busca un entorno sin distracciones.

Sumado a ello, también existe una práctica cada vez más común: las vacaciones silenciosas. Al respecto, de acuerdo con el informe Out of Office Culture Report de Harris Poll, un 40% de los millennials y la generación Z han aparentado trabajar en línea para tomarse unos días libres sin permiso.

gen z

En este sentido, PapersOwl indagó todavía más a fondo. Para evitar el burnout o simplemente liberarse del estrés, cerca de un 51% de los jóvenes de la generación Z han optado por las quiet vacations entre una y tres veces al año. Pero hay de casos a casos, en el mismo lapso el 4% lo ha hecho más de cinco veces.

Entre otros datos también se reveló que un 27% llama para avisar que se encuentra enfermo, para también tomarse unos días libres, claro está. Finalmente, otro 29% ha aplicado técnicas de catfishing a las empresas solo para ser contratado y luego desaparecer. También conocido como ghosting laboral.

Como mencionamos, todo lo anterior puede relacionarse con la búsqueda de los jóvenes para equilibrar su vida laboral y personal. Su bandera de no sobreponer el trabajo por encima de todo lo demás, aunque poco convencional, puede que sea la razón de que muchos jefes piensen en renunciar a su puesto para no lidiar con ellos.

Cortesía de Xataka



Dejanos un comentario: