Este continente se está partiendo en dos y los científicos creen que esto puede formar un nuevo océano

África Oriental está pasando por una transformación geológica sin precedentes en la historia natural moderna. Lo que hasta hace poco era una teoría a largo plazo, hoy se presenta como una realidad observable, el continente africano se está partiendo en dos y este proceso podría desembocar en la formación de un nuevo océano. De acuerdo con Farmingdale Observer, la fractura continental ya es visible en diversas regiones del este africano y las fuerzas tectónicas que la originan llevan operando desde hace al menos 25 millones de años.

Este fenómeno ocurre en el Sistema del Rift de África Oriental, una vasta zona de fallas de más de 6,000 kilómetros que va desde Mozambique hasta el Mar Rojo. Allí convergen tres placas tectónicas: la africana, la somalí y la arábiga, que se están separando lentamente. Según IDR, este proceso, que alguna vez se pensó tomaría decenas de millones de años, podría completarse mucho antes de lo esperado.

El nacimiento de un océano: lo que ocurre cuando los continentes se desgarran

Los científicos coinciden en que la grieta visible entre países como Etiopía, Kenia y Somalia podría, eventualmente, dar lugar a un nuevo océano. Como explicó a Farmingdale Observer el geólogo Gilles Chazot, de la Universidad de Bretaña Occidental, “los océanos de la Tierra surgen de la fractura de un continente que se divide en dos“. Así ocurrió hace millones de años con la separación entre África y América que formó el océano Atlántico.

La evidencia es cada vez más clara. Según IDR, en 2005, en la región de Afar (Etiopía), se abrió una fisura de 60 kilómetros en tan solo unas semanas, acompañada de más de 420 terremotos. En algunos puntos, el suelo se separó hasta 2 metros. Estos eventos aceleraron drásticamente las proyecciones, ya que, lo que parecía una ruptura a muy largo plazo, ahora se estima que podría completarse en un millón de años o incluso antes.

Investigaciones desde 1986 muestran que la fractura no es nueva, pero ahora es más activa que nunca

Este fenómeno no es nuevo para la comunidad científica. Desde 1986, la revista Nature ha documentado de forma sistemática la evolución del rift. En uno de sus estudios iniciales, los científicos detectaron que la rama oriental del Rift africano se conecta con estructuras submarinas en la costa de Mozambique, incluida la dorsal de Davie y los fosos tectónicos de Kerimbas y Lacerda. Estas formaciones subacuáticas indican que la separación continental tiene raíces profundas y una historia que involucra fallas transformantes activas desde el Jurásico tardío.

Un estudio más reciente, publicado en 2011, confirma que la ruptura continental en Etiopía permite observar directamente la transición entre la extensión terrestre y el inicio del fondo oceánico. Esta región es uno de los pocos lugares en el mundo donde este proceso ocurre sin estar cubierto por gruesas capas de sedimentos y lava. En las investigaciones se sostiene que la intrusión de magma, el adelgazamiento de la corteza y las fallas tectónicas ocurren de manera secuencial y preparan el terreno para la eventual creación de un nuevo mar.

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Geopolítica y ecosistemas: el impacto potencial de una África dividida

Más allá del campo científico, esta transformación geológica plantea desafíos territoriales. De acuerdo con Farmingdale Observer, la fractura atraviesa el Cuerno de África, una región de enorme importancia estratégica. Su cercanía con el Mar Rojo y el Canal de Suez, esenciales para el comercio marítimo mundial, significa que una reconfiguración geográfica en esta zona podría tener implicaciones en las rutas comerciales y en los ecosistemas marinos y terrestres.

A medida que el borde oriental del continente se aleja, regiones como Somalia, Etiopía y parte de Kenia podrían convertirse en una gran isla separada del resto de África por un nuevo océano. Según IDR, esta posibilidad ya no es una exageración futurista, sino una proyección plausible con base en los eventos observados en los últimos años.

Cortesía de Xataka



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