Hubo un tiempo en que un coche no era solo un medio de transporte, sino una herramienta para cambiar el mundo. Ese fue el caso del Renault 4, el primer modelo verdaderamente universal de la marca francesa. Con su silueta sencilla, su practicidad inigualable y su alma de aventurero incansable, el “cuatro latas” conquistó corazones en más de 100 países y se convirtió en un icono de la movilidad popular. Hoy, seis décadas después de su nacimiento, este mito de la automoción regresa, transformado y electrificado, desde el epicentro de la innovación de Renault en España: el Centro de I+D+i de Valladolid.
El nuevo Renault 4 E-Tech eléctrico no es una simple reinterpretación nostálgica. Es una declaración de intenciones. Con una autonomía de hasta 400 kilómetros, una habitabilidad generosa y tecnologías de asistencia de última generación, este modelo encarna el espíritu del original, pero adaptado a los retos de la movilidad del siglo XXI. Más que un coche, es una forma de entender la conducción: accesible, versátil, robusta y, ahora, sostenible.
Este artículo se adentra en los detalles de ese renacimiento. Desde sus raíces como revolución sobre ruedas en los años 60 hasta su reencuentro con el presente en una jornada muy especial en Valladolid, donde clásicos y futuro se dieron la mano. Descubriremos cómo el nuevo Renault 4 E-Tech ha sido concebido, desarrollado y validado con sello español, y qué papel desempeña dentro de la estrategia de electrificación de Renault.
En definitiva, es la historia de un regreso. Un coche que nunca dejó de estar presente en la memoria colectiva, y que ahora vuelve para desafiar los límites de lo que puede ser un vehículo del futuro. Bienvenidos al redescubrimiento de un mito: el Renault 4 que conoció el pasado… y ahora también conoce el porvenir.

El Renault 4 original: una revolución con ruedas
Concebido en 1961 como un coche para todos, el Renault 4 rompió moldes con su diseño funcional y versátil. En plena transformación social de la Europa de los años 60, Pierre Dreyfus impulsó la creación de un vehículo que no se limitara a transportar personas, sino que ofreciera soluciones prácticas a la vida cotidiana. La idea de un “volumen últil” y una arquitectura sencilla lo convirtió en el “blue-jean” del automóvil.

Un fenómeno de masas con sabor español
Fabricado en 28 países y vendido en más de 100, el Renault 4 fue un éxito rotundo. En España, su impacto fue especialmente notable: entre 1963 y 1992 se produjeron más de 800.000 unidades en Valladolid. Fue una solución de movilidad asequible y robusta para un país con una baja tasa de motorización. Su mecánica sencilla, su fiabilidad y su carácter todoterreno lo hicieron indispensable.

Renacimiento con propósito: Renault 4 E-Tech eléctrico
Treinta años después de que cesara su producción, el Renault 4 regresa como un coche 100% eléctrico. Diseñado para ser funcional, accesible y sostenible, el nuevo modelo mantiene el espíritu versátil del original, pero ahora impulsado por la tecnología más puntera.

Plataforma y autonomía: base moderna para un clásico renovado
Construido sobre la plataforma AmpR Small, una arquitectura específica para vehículos eléctricos compactos del Grupo Renault, el Renault 4 E-Tech alcanza una autonomía de hasta 400 kilómetros en ciclo WLTP. Esta plataforma, que comparte base técnica con el Renault 5 E-Tech, está optimizada para albergar baterías de alta densidad energética sin comprometer el espacio interior ni la modularidad.
El diseño de la plataforma proporciona un centro de gravedad bajo, lo que se traduce en una mayor estabilidad en curva y una conducción más segura y confortable. Además, incorpora una suspensión ajustada para equilibrar agilidad urbana y confort en trayectos largos. El sistema de conducción “one pedal” permite gestionar aceleración y frenado con un solo pedal, mejorando la eficiencia energética y reduciendo el cansancio en la conducción diaria. Esta tecnología, junto con el sistema de frenado regenerativo, permite maximizar el aprovechamiento de la energía durante la marcha, una ventaja clave para usuarios que buscan sostenibilidad sin renunciar a la autonomía ni al placer de conducir.
Con estas características, el Renault 4 E-Tech se posiciona como una opción robusta, moderna y funcional para quienes desean dar el salto a la movilidad eléctrica con garantías de rendimiento y versatilidad.

Habitabilidad y maletero: espacio optimizado
El nuevo Renault 4 ofrece una habitabilidad líder en su segmento y un maletero de 420 litros, con formas pensadas para aprovechar cada centímetro. Es una opción ideal para familias, escapadas o simplemente para quienes valoran el espacio sin renunciar al diseño.

Tracción inteligente para todos los caminos
Gracias al sistema Extended Grip, el Renault 4 E-Tech mejora la tracción en superficies irregulares, como grava, barro o nieve ligera. Este sistema adapta automáticamente el par motor y la respuesta del acelerador para maximizar el agarre, ofreciendo así una conducción más segura y fluida en condiciones adversas.
Junto a su elevada distancia al suelo, este vehículo eléctrico se posiciona como una opción versátil, capaz de afrontar tanto el tráfico urbano como los caminos rurales más exigentes. Esta capacidad de adaptación lo convierte en un aliado ideal para conductores que buscan un coche útil durante la semana en ciudad y fiable durante escapadas de fin de semana, sin sacrificar confort ni eficiencia. Una vez más, el espíritu todo terreno del Renault 4 original vuelve a cobrar vida en su reinterpretación eléctrica.

Conectividad y asistencias a la conducción
Dotado de las últimas ayudas a la conducción (ADAS), el modelo incorpora sistemas como el asistente inteligente de velocidad (ISA), el frenado de emergencia activo (AEBS) y el sistema de detección de manos en el volante (HOD). Estas funciones refuerzan la seguridad y mejoran la experiencia al volante.

I+D+i español al servicio de la movilidad del futuro
El papel del Centro de I+D+i de Renault en Valladolid ha sido crucial en el desarrollo del Renault 4 E-Tech. Más allá de ser una simple base técnica, estas instalaciones se han convertido en un verdadero laboratorio de innovación aplicada al vehículo eléctrico. Con un equipo multidisciplinar de más de 600 ingenieros y técnicos altamente cualificados, el centro ha liderado tareas esenciales como la validación de sistemas avanzados de asistencia a la conducción (ADAS), la integración electrónica y la adecuación del vehículo a los exigentes estándares europeos de seguridad y confort.
Entre sus logros más destacados figura la validación del asistente inteligente de velocidad (ISA), mediante pruebas en condiciones reales, incluyendo trayectos internacionales, así como el ensayo del sistema de frenado de emergencia activo (AEBS) a través de simulaciones complejas con errores inducidos para garantizar su fiabilidad. También ha sido clave en el desarrollo del sistema de detección de manos en el volante (HOD), que asegura una interacción adecuada entre el conductor y los sistemas semiautónomos del coche.
Este trabajo, riguroso y altamente especializado, posiciona al centro de Valladolid como un nodo estratégico dentro de la red global de Renault. No solo impulsa la calidad del producto final, sino que también refuerza el papel de la ingeniería española en el mapa de la automoción internacional, aportando valor añadido a cada kilómetro que recorrerá el nuevo Renault 4 E-Tech eléctrico.

Infraestructuras y tecnología de vanguardia
El Centro de I+D+i de Renault en Valladolid no solo destaca por su capital humano, sino también por su potente infraestructura técnica. Cuenta con una pista de ensayos dinámica que permite simular condiciones de conducción reales, desde frenadas de emergencia hasta maniobras de evasión. Esta instalación es clave para evaluar el comportamiento del vehículo ante situaciones críticas y asegurar que cumple con los más altos estándares de seguridad.
Además, alberga los laboratorios PIES (Plataformas de Integración Electrónica del Sistema), donde se prueban y validan los sistemas electrónicos antes de ser instalados en los vehículos. Gracias a estos entornos controlados, es posible detectar y corregir cualquier anomalía con antelación, optimizando los tiempos de desarrollo y reduciendo costes.
El Creative Lab, por su parte, funciona como un espacio colaborativo en el que ingenieros, diseñadores y expertos en software trabajan en conjunto para desarrollar soluciones innovadoras. Aquí nacen conceptos disruptivos en materia de conectividad, inteligencia artificial aplicada al coche y experiencia de usuario.
A esto se suman avanzados entornos de simulación, capaces de recrear digitalmente desde el flujo aerodinámico hasta la interacción de los sensores ADAS en distintas condiciones climáticas y de tráfico. Este ecosistema de alta tecnología convierte al centro en un actor clave dentro de la red global de Renault Group, asegurando que el Renault 4 E-Tech eléctrico no solo rinda al máximo, sino que también cumpla con las exigencias del mercado en cuanto a innovación, seguridad y sostenibilidad.

Herencia y modernidad: un encuentro emocional
El reencuentro entre el Renault 4 original y su versión eléctrica no es solo simbólico. Es una declaración de principios: la historia industrial de Renault puede evolucionar sin renunciar a su esencia. La pasión por el pasado se convierte en motor del futuro.

El “blue-jean” del siglo XXI
El nuevo Renault 4 E-Tech es, como su antecesor, un coche para todos. Pero esa sencillez no significa conformismo: significa una apuesta decidida por lo esencial. Como los pantalones vaqueros que le dieron su apodo, este modelo es resistente, polivalente y siempre actual. No busca impresionar con ornamentos superfluos, sino ganarse la confianza del usuario por su funcionalidad, adaptabilidad y coherencia con los tiempos.
Con un diseño robusto, soluciones inteligentes y una propuesta eléctrica accesible, el Renault 4 E-Tech recupera el espíritu del modelo original para convertirlo en un icono del presente. Su versatilidad le permite desenvolverse con soltura en el entorno urbano, afrontar escapadas por caminos rurales y cumplir con solvencia las exigencias del día a día. Y todo ello con una estética que homenajea sus raíces, pero sin renunciar a una identidad moderna y atractiva.
Su retorno no es nostalgia, es innovación con raíces. Una evolución lógica de un concepto que siempre aspiró a la universalidad, ahora con el valor añadido de la sostenibilidad y la tecnología.

Renault 4 E-Tech eléctrico: entre la memoria y el futuro
La transformación del Renault 4 en un modelo eléctrico no es una operación comercial vacía, sino un ejercicio de coherencia y visión industrial. En una época donde la movilidad sostenible se ha vuelto imperativa, Renault ha optado por mirar al pasado para inspirar el futuro, recuperando un icono querido por generaciones y dotándolo de las capacidades que exigen los nuevos tiempos.
Este modelo no solo hereda el espíritu práctico y democrático del original, sino que incorpora avances tecnológicos como plataformas dedicadas a la electrificación, sistemas de asistencia a la conducción de última generación y soluciones de conectividad que lo sitúan en plena sintonía con los estándares actuales. Además, su desarrollo en el Centro de I+D+i de Valladolid refuerza el papel de la ingeniería española en la evolución de la automoción global.

El Renault 4 E-Tech eléctrico no pretende competir con los SUV premium ni con los compactos futuristas; su propuesta es más profunda: ser un vehículo accesible, útil y emocionalmente cercano. Un coche que acompaña al usuario en su día a día con fiabilidad, eficiencia y una estética que rinde homenaje a su historia. En definitiva, es una pieza de historia que se reinventa sin perder el alma, y que vuelve para ser, una vez más, parte del paisaje cotidiano de millones de personas.
Cortesía de Muy Interesante
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