Cada año, miles de toneladas de sargazo llegan a las costas del estado de Quintan Roo. Esta microalga marina se reproduce rápidamente y se agrega en enormes masas flotantes que se extienden sobre el Mar Caribe; y es esta característica la que hace del sargazo un problema, ya que las enormes cantidades que se acumulan en las playas requieren esfuerzos considerables para retirarlas, además de que imponen el reto de qué hacer con todo ese residuo.
En 2011 se tuvo registro del primer arribo masivo de sargazo al Caribe mexicano y 2 años después llegaron cantidades inusuales de estos organismos. Cuando hay crecimiento excesivo de sargazo, estas algas llegan a lugares donde normalmente no existían y pueden causar problemas, sin embargo, no solamente es una plaga; hoy día se sabe de varios usos que, con el debido tratamiento, se le pueden dar al sargazo.
La Secretaría de Ecología y Medio Ambiente de Quintana Roo refiere que la llegada de esta alga al Caribe mexicano ha generado gran interés debido a su potencial como biorresiduo a partir del cual se pueden desarrollar diversos productos sostenibles y de valor agregado. No obstante, advierte que se requiere la creación de protocolos y metodologías efectivas, para hacerlo de manera exitosa y segura. Aquí te contamos 5 usos que, de acuerdo con esta institución, se le pueden dar al sargazo.
En la industria alimentaria
El sargazo contiene elementos y compuestos químicos que podrían utilizarse como complemento en la alimentación de los animal, siempre y cuando se apliquen los procesos necesarios de tratamiento para que la concentración de elementos tóxicos no rebase las normas establecidas para su uso.
Para elaborar medicamentos y cosméticos
Los compuestos bioactivos presentes en el sargazo, como, polisacáridos, alginatos y antioxidantes, tienen propiedades antibacterianas, antivirales y antitumorales, por lo que tiene un gran potencial para el desarrollo de medicamentos. Estos compuestos también son útiles para elaborar productos cosméticos como geles, cremas, lociones y champús.
Como fertilizantes orgánicos y mejoradores de suelos
El sargazo se puede utilizar como biorresiduo para elaborar fertilizantes orgánicos capaces de mejorar la calidad del suelo y aumentar la productividad agrícola, así como ayudar a combatir el estrés en los cultivos y protegerlos de amenazas.
Para generar energía limpia
Unido a otros residuos orgánicos, el sargazo podría ser utilizado como fuente de energía renovable, mediante su transformación en biocombustibles y biogás.
En la fabricación de materiales textiles
El cuero vegano es un ejemplo de los textiles que se pueden fabricar a partir del sargazo. En el mercado ya existen tecnologías para transformar diversos tipos de biomasa en elementos textiles.
Cortesía de El Heraldo de México
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