El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reiteró este miércoles la posibilidad de que su país lance un ataque militar contra Irán y afirmó que “nadie sabe” cuál será finalmente su decisión. Sin embargo, tanto Teherán como Rusia y China advirtieron que una intervención directa de Washington podría agravar la situación en Medio Oriente.
“Puede que lo haga. Puede que no lo haga. Quiero decir, nadie sabe lo que voy a hacer”, respondió el mandatario al ser preguntado por la prensa en la Casa Blanca sobre una posible intervención. “Puedo decir esto: Irán tiene muchos problemas y quiere negociar. ¿Por qué no negociaron conmigo hace dos semanas? Podrían haberlo hecho bien. Habrían tenido un país. Es muy triste ver esto”, agregó.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, también se negó a confirmar la posibilidad de un inminente bombardeo de su país a Irán, durante una audiencia en el Senado en la que evitó contestar directamente sobre si el presidente, Donald Trump, le ha solicitado planes para la entrada en el conflicto entre Israel y Teherán. “Si hubiera solicitado o no (los planes), no lo revelaría en este foro”, dijo el líder del Pentágono ante el Comité de las Fuerzas Armadas de la Cámara Alta del Congreso.
“Sabemos ahora mismo que Teherán entiende exactamente lo que dice el presidente. Dijo que durante 60 días tuvieron la oportunidad de llegar a un acuerdo. Deberían haberlo hecho. La palabra del presidente Trump significa algo. El mundo lo entiende. Y en el Departamento de Defensa nuestro trabajo es estar preparados con opciones, y eso es precisamente lo que estamos haciendo”, se limitó a decir Hegseth.
“Jamás humillarse ante la Casa Blanca”
Trump también señaló en sus declaraciones a la prensa que Irán todavía quiere negociar un acuerdo nuclear con Estados Unidos y que incluso propuso mandar una delegación a Washington. “Sugirieron venir a la Casa Blanca. Es algo valiente por su parte, algo que no les resulta fácil”, dijo el líder republicano, quien añadió que fueron los iraníes quienes se pusieron en contacto con él, pero estimó que es demasiado tarde para hablar.
La parte iraní, sin embargo, negó que esa propuesta haya tenido lugar. “Ningún funcionario iraní ha pedido jamás humillarse ante la Casa Blanca. Lo único más despreciable que sus mentiras es su cobarde amenaza de ‘eliminar’ al líder supremo de Irán (Alí Jameneí)”, expresó la misión permanente de Irán ante la ONU en su cuenta de la red social X. “Irán no negocia bajo presión, no aceptará la paz bajo presión, y mucho menos con un belicista en decadencia que se aferra a la relevancia”, recalcó, además de subrayar que responderá a cualquier amenaza o acción con medidas recíprocas.
En un discurso televisado, Jameneí advirtió a Estados Unidos que sufrirá un “daño irreparable” si intervienen militarmente contra su país. “Los estadounidenses deben saber que la nación iraní no se rendirá y que cualquier intervención militar por su parte causará, sin duda, daños irreparables”, aseguró. “La gente inteligente que conoce la historia de Irán nunca le hablará a esta nación en un lenguaje amenazante porque la nación iraní no puede ser entregada”, remarcó, en una aparente referencia a los dichos de Trump.
El martes, el mandatario estadounidense pidió el “rendimiento incondicional” de Irán. “Sabemos exactamente dónde se esconde el llamado ‘líder supremo’. Es un blanco fácil, pero allí está a salvo. No vamos a eliminarlo (¡matarlo!), al menos no por ahora”, anunció en un mensaje publicado en su red social, Truth Social.
La advertencia rusa
Mientras tanto, Rusia también criticó las palabras de Trump, alertando sobre la participación directa de Estados Unidos en el conflicto armado entre Israel e Irán. “Advertimos a Washington contra este tipo de acciones e incluso especular sobre ello. Esto desestabilizaría radicalmente toda la situación”, dijo el viceministro de Exteriores ruso, Serguéi Riabkov, en declaraciones a la agencia de noticias Interfax. “(Estados Unidos) está constantemente a la vanguardia de todos los procesos, y es un error decir que no ha interferido antes en otras regiones del mundo, sin embargo, una implicación directa en ese conflicto sería diferente”, insistió.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, había abordado el sábado por teléfono con Trump el peligro de la escalada del conflicto en Medio Oriente tras la operación militar de Israel contra Irán. “Vladímir Putin condenó la operación militar israelí y expresó su profunda preocupación por la posible escalada del conflicto, que tendría consecuencias impredecibles para toda la situación en Medio Oriente”, detalló el asesor de la Presidencia, Yuri Ushakov, a la prensa. “La conversación entre líderes fue franca y muy útil”, aseguró.
Además, el mandatario ruso reiteró la disposición de su pais de mediar para la solución del conflicto entre Israel e Irán. El día anterior Putin condenó el ataque israelí contra la cúpula militar de Irán y sus instalaciones nucleares durante una llamada telefónica con el líder iraní, Masud Pezeshkian. En otra conversación con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, abogó por “regresar al proceso negociador y a la solución de todos los asuntos relacionados con el programa nuclear iraní exclusivamente por medios político-diplomáticos”.
La postura de China
El Gobierno chino también aseguró este miércoles estar profundamente preocupado por la situación en Medio Oriente, tras las palabras de Trump sobre Jameneí. “(Beijing) se opone a cualquier violación de los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas que atente contra la soberanía, la seguridad y la integridad territorial de otros países”, declaró el portavoz de la Cancillería china, Guo Jiakun, declaró en una rueda de prensa.
“Un deterioro de la situación en Oriente Medio no beneficia a ninguna de las partes implicadas”, explicó el vocero. “Los países con especial influencia sobre Israel deben adoptar una postura objetiva y justa y desempeñar un papel positivo y constructivo para aliviar la situación y evitar la escalada de conflictos”, agregó el vocero, en referencia a Estados Unidos.
El fin de semana el canciller chino, Wang Yi, confirmó mediante un comunicado el apoyo de Beijing a Teheran en una llamada con su homólogo iraní, Abás Araqchi. “Las acciones de Israel violan gravemente (…) las normas esenciales que gobiernan las relaciones internacionales”, señaló, según la misma fuente. “Los bombardeos israelíes en instalaciones nucleares de Irán crearon un precedente peligroso, de consecuencias potencialmente catastróficas”, apuntó.
El canciller chino también habló con su par israelí, Gideon Saar, y denunció el ataque lanzado contra Irán, además de contarle lo que había hablado con el canciller iraní, según otro comunicado. “No se han agotado los medios diplomáticos sobre la cuestión del programa nuclear iraní y todavía queda esperanza de una solución pacífica”, dijo. “La fuerza no puede conducir a una paz duradera”, remarcó, según el comunicado. Asimismo, Wang le dijo a los dos cancilleres que China desearía jugar un papel constructivo para rebajar tensiones en el conflicto.
El embajador chino ante Naciones Unidas, Fu Cong, también mostró el apoyo de su país a Irán en un discurso ante el Consejo de Seguridad de la ONU, en el cual exigió a Israel que detenga inmediatamente todas sus acciones militares. “China siempre ha estado comprometida con la resolución pacífica de la cuestión nuclear iraní a través del diálogo y las consultas, y se opone al uso de la fuerza, de sanciones unilaterales ilegales y de ataques armados contra instalaciones nucleares pacíficas”, afirmó.
Cortesía de Página 12
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