Hallazgo histórico en Ítaca: descubren el santuario perdido de Odiseo con inscripciones secretas, joyas milenarias y un culto olvidado durante siglos

Durante más de un siglo, la isla de Ítaca ha sido objeto de mitos, hipótesis arqueológicas y debates en torno a su papel en los poemas homéricos. Pero en las últimas semanas, un nuevo capítulo se ha abierto con fuerza. Un equipo de arqueólogos griegos ha revelado el hallazgo de inscripciones, estructuras monumentales y objetos votivos que apuntan a la existencia de un santuario heroico dedicado a Odiseo, el mítico rey de Ítaca y protagonista de la “Odisea”. El descubrimiento se localiza en el sitio de Agios Athanasios, conocido desde el siglo XIX como la “Escuela de Homero”.

El anuncio del hallazgo fue realizado por el Ministerio de Cultura de Grecia y forma parte del proyecto de investigación arqueológica de la Universidad de Ioánina, que desde 2018 estudia los resultados de excavaciones realizadas entre 1994 y 2011. El lugar, situado en la ladera oriental de la región de Exogi, ofrece una visión privilegiada del pasado más remoto de la isla y, con este nuevo hallazgo, confirma que Ítaca no fue solo un escenario literario, sino también un centro de culto real y activo en tiempos históricos.

Un centro de poder desde la prehistoria

La importancia del lugar va mucho más allá del periodo homérico. Las capas más antiguas revelan una ocupación desde el Neolítico Final, alrededor del 4000 a. C., con herramientas de sílex y fragmentos cerámicos. Pero es en la Edad del Bronce, especialmente entre los siglos XIV y XIII a. C., cuando la presencia humana se intensifica y cobra un carácter más estructurado. Durante este periodo micénico, el sitio parece haber sido parte de una red de asentamientos estratégicamente situados en el noroeste de la isla, encargados de vigilar los puertos y gestionar los recursos hídricos.

Entre los hallazgos más significativos destaca una fuente subterránea intacta, revestida con piedras corbeladas y datada en la fase palaciega micénica. Esta cisterna, una de las pocas de su tipo conocidas en el mar Egeo, es una evidencia clara de la sofisticación hidráulica de la época y del valor simbólico y funcional del lugar.

Vista desde el norte de la torre helenística situada en Ano Andiros, en el enclave arqueológico de la llamada Escuela de Homero, en Ítaca
Vista desde el norte de la torre helenística situada en Ano Andiros, en el enclave arqueológico de la llamada Escuela de Homero, en Ítaca. Foto: Ministerio de Cultura de Grecia/Christian Pérez (composición)

De mito a religión: el culto a Odiseo

Aunque Odiseo pertenece al universo de la literatura y la mitología, el nuevo hallazgo demuestra que para los habitantes de Ítaca, su figura fue mucho más que un relato épico. En el corazón del yacimiento se han encontrado 14 tejas helenísticas y romanas con inscripciones griegas y latinas. En dos de ellas aparecen las palabras “Odysseos” y “Odyssei”, claras referencias al héroe. Una parece indicar la posesión del lugar por parte de Odiseo, y la otra sugiere una dedicatoria, probablemente de un peregrino.

Estos hallazgos epigráficos no son aislados. En la década de 1930 ya se había encontrado una inscripción similar en una cueva de la bahía de Polis, también en Ítaca. Sumados al descubrimiento de un busto de bronce con rasgos iconográficos vinculados a Odiseo y a la abundancia de ofrendas votivas —figuras de terracota, joyas de oro y bronce, monedas y grandes recipientes rituales—, refuerzan la hipótesis de que nos encontramos ante un verdadero “Odiseión”: un santuario heroico que funcionó activamente desde el periodo helenístico hasta al menos el siglo II d. C.

La arquitectura del complejo revela una planificación monumental. Está distribuido en terrazas escalonadas unidas por escaleras talladas en la roca. En el nivel superior, conocido como el Andiros Superior, domina una torre helenística del siglo III a. C. Más abajo, en el Andiros Inferior, se encuentra un gran edificio rectangular que pudo haber albergado ceremonias religiosas o actividades comunitarias.

Numerosos nichos excavados en la roca sugieren un uso intensivo como espacio de culto. Estos nichos, posiblemente diseñados para contener inscripciones o figuras votivas, refuerzan el carácter ritual del conjunto. Además, las referencias epigráficas al dios Apolo Aghieos presentes en algunas tejas revelan una sinergia entre los cultos panhelénicos y las tradiciones locales centradas en Odiseo.

Un fragmento de teja con inscripción parcial del nombre de Odiseo ha sido fechado en la época helenística
Un fragmento de teja con inscripción parcial del nombre de Odiseo ha sido fechado en la época helenística. Foto: Ministerio de Cultura de Grecia

Odiseo como figura cívica y religiosa

Uno de los aspectos más fascinantes de este hallazgo es cómo el culto a Odiseo parece haber trascendido lo estrictamente religioso para adquirir una dimensión política y social. Una resolución de la ciudad de Magnesia en Asia Menor, datada hacia el 207 a. C., menciona expresamente la existencia en Ítaca de un recinto dedicado a Odiseo —la “Odiseia”—, junto con la celebración de competiciones deportivas en su honor.

Todo ello sugiere que el santuario no era solo un lugar de peregrinación, sino también un espacio de cohesión comunitaria, donde la memoria del héroe se integraba en la vida pública de los ítacos. Como otros héroes mitológicos del mundo griego, Odiseo fue probablemente divinizado y convertido en símbolo de identidad local.

Una estatua de bronce que presenta rasgos asociados tradicionalmente a las representaciones de Odiseo
Una estatua de bronce que presenta rasgos asociados tradicionalmente a las representaciones de Odiseo. Foto: Ministerio de Cultura de Grecia

Este hallazgo obliga a replantear los límites entre literatura, religión e historia. Aunque Odiseo probablemente nunca existió como individuo histórico, lo cierto es que su figura fue tratada por generaciones como si hubiera sido real. Los peregrinos dejaron inscripciones con su nombre. Las comunidades celebraron ritos y juegos en su honor. Los artesanos modelaron bustos con su imagen. Y lo hicieron durante siglos.

En palabras del Ministerio de Cultura de Grecia, el complejo puede identificarse “con certeza” como el santuario mencionado en fuentes antiguas, consolidando así la existencia de un culto duradero y extendido en torno a Odiseo. El proyecto, que continúa en marcha con el apoyo de la Universidad de Ioánina, representa no solo un avance en la arqueología griega, sino una ventana directa al alma religiosa y cívica de la Ítaca antigua.

Cortesía de Muy Interesante



Dejanos un comentario: