Así como Jason Statham parece que se encasilló en el mismo estilo de películas bajo el arquetipo de un solo personaje, algo similar le sucedió a Liam Neeson. No es queja, muchos de sus proyectos se parecen en cuanto a trama, pero te la pasas tan bien que no querrás moverte de tu sillón. ¿Y por qué no? Es momento de recomendar una de esa películas.
A fin de alejarse de la violencia política que azota a Irlanda durante la década de lo 70, Finbar Murphy lleva una vida tranquila en las costas de Glencolmcille. Pero cuando un peligroso grupo de terroristas amenaza al pueblo, Finbar tendrá que decidir si revelar su identidad o defender a su comunidad. Esto es: En tierra de santos y pecadores.
Como devela la sinopsis, estamos frente a un clásico thriller de acción donde Neeson, más destacable en su actuación de lo habitual, desata una cacería desencarnada para ejecutar villanos a diestra y siniestra. Como bien se dijo en un inicio, es otra más de las películas del actor, pero no por ello tiene que menospreciarse.
De entrada, lo que hace distinto a este metraje es quién esta enfrente del proyecto. Hablamos de Robert Lorenz. Este veterano de la industria se encargó de producir múltiples filmes de Clint Eastwood, desde Río Místico, Golpes del destino, Gran Torino o Francotirador, por lo que el sello de calidad se encuentra presente.
No podemos dejar de lado al propio Neeson quien, con el mero nombre, ya impone autoridad tanto fuera como dentro de la pantalla. Su presencia, aunada a la tridimensionalidad del personaje al que le da vida, se ven estéticamente enmarcadas por los paisajes irlandeses. Toda una masacre ambientada entre acantilados y tierra verde.
Más a su favor, el filme tuvo una buena recepción tanto por parte de la crítica como de la audiencia. En el sitio Rotten Tomatoes se posiciona como uno de los mejores thrillers de acción de la estrella en años. A su vez, en Letterboxd cuenta con una aprobación media de 3.1, que a agrandes términos es aceptable. Algunas reseñas especializadas indican:
“Un western irlandés sólido y a la antigua usanza sobre lo que significa dejar el fusil. No es especialmente profundo, pero es bueno ver cómo Liam Neeson encuentra profundidad en su personaje entre los disparos y las quejas habituales”.
“Neeson está tan sólido como siempre en un papel que Clint Eastwood podría haber interpretado hace 20 años y a miles de kilómetros de distancia”.
“Neeson parece tan fuerte como siempre en el papel de ‘gran tipo’: tiene 71 años, y todo indica que seguirá pecando, siempre que haya un niño en apuros”.
Como podemos observar, es una buena opción para disfrutar en un rato de ocio o para los fanáticos del actor y del género. No vamos a negar que cuenta con ciertos clichés que se han visto en otras cintas de este tipo, pero si lo que buscas son dosis de sangre, tensión y un tiroteo final frenético, no tienes que buscar más.
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Cortesía de Xataka
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