Desde hace años, Microsoft ha buscado formas de modificar la conocida como pantalla azul de la muerte. Desde 2021, con la llegada de Windows 11, ya se habían mostrado señales de esta intención.
Ahora todo indica que finalmente la modificación será permanente. Luego de varias pruebas e iteraciones, este elemento característico del sistema operativo desaparecerá definitivamente, tras casi 40 años de existencia.
De acuerdo con una actualización en su blog, la BSOD ahora se conocerá como la Pantalla Negra de la Muerte. Además del cambio de color, se modifican otros elementos del diseño, como la clásica “cara fruncida” y el código QR, para dar paso a una interfaz mucho más simplificada.
Esta nueva pantalla se asemeja más a la que aparece durante una actualización de Windows. Aun así, conservará el código de error y la información sobre el controlador defectuoso, para facilitar el diagnóstico de fallos.
La nueva BSOD será más sencilla y útil
Según el blog oficial de Microsoft, esta implementación forma parte de las mejoras para enfrentar los “reinicios inesperados”, optimizados con una experiencia reducida que mejora la legibilidad y se ajusta mejor a los principios de diseño de Windows 11. Al mismo tiempo, conserva la información técnica relevante en pantalla para quienes la necesiten.
Este nuevo diseño llegará junto con una nueva función llamada “Recuperación Rápida de Máquinas”, que permitirá restaurar rápidamente los equipos que no puedan arrancar.
Microsoft indica que la nueva interfaz de usuario simplificada para reinicios inesperados estará disponible a partir de finales del verano para todos los dispositivos con Windows 11 que actualicen a la versión 24H2.
Estos cambios se suman a las respuestas de la compañía luego del colapso provocado por CrowdStrike, un incidente que hizo que millones de equipos iniciaran directamente en una pantalla azul de la muerte.
Cortesía de Xataka
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