Mientras el Senado de Estados Unidos aprobó por un voto el plan fiscal y presupuestario de Donald Trump, el magnate y ex asesor presidencial Elon Musk continúa peleándose por redes sociales con la Casa Blanca por el incremento en el endeudamiento. Entre esos cruces, Musk recibió la factura de sus repetidos encuentros con el presidente Javier Milei, motosierra incluida. “Quizás no deberías haber subido la motosierra al escenario y haberte portado como un tonto”, le criticaron en las redes. “Punto válido”, reconoció el dueño de Tesla.
El multimillonario fue el más fiel aliado de Milei durante la campaña presidencial de Trump y durante los pocos meses que duró su cargo en la Casa Blanca al frente del DOGE (Deparatamento de Eficiencia Gubernamental, según sus siglas en inglés), organismo que el presidente argentino se ufanó de ser inspirado por el Ministerio de Desregulación de Federico Sturzenegger.
Musk festejó el discruso homofóbico de Milei en Davos y lo recibió en varias de las repetidas visitas presidenciales para asistir a reuniones con magnates que aplaudían las diatribas de Milei contra el Estado y en contra del pago de impuestos. Pero la foto más recordada fue la última, durante la Conferencia de Acción Conservadora (CPAC), en la que Milei subió al escenario, le gritó “amigo” y la regaló una motosierra plateada.
Sus reiteradas expresiones públicas a favor de Milei, le jugaron en contra a Musk en medio de su pelea encarnizada con Trump. “Quizás no deberías haber subido la motosierra al escenario y haberte portado como un tonto. Quizás podrías haber hecho más si no te preocupara tanto verte bien”, le apuntaron en las redes.
Musk reconoció que lo dicho era un “punto válido” y reflexionó: “Milei me dio la motosierra entre bastidores y la usé, pero, en retrospectiva, le faltó empatía”. El magnate recibió esa respuesta en medio de sus críticas contra el presupuesto votado por el Senado sobre el que aseguraba: “Alcanzar el techo de la deuda es lo único que realmente obligará al gobierno a reducir el despilfarro y el fraude. ¡Por eso existe la legislación sobre el techo de la deuda!”
El Senado aprobó este martes por un voto el polémico plan fiscal y presupuestario del presidente de Trump, que ahora es devuelto a la Cámara Baja del Congreso para su revisión y voto final, con la presión de remitirlo al mandatario para su firma antes del 4 de julio.
El proyecto pudo ser aprobado gracias a que el vicepresidente James Vance desempató con su voto para un 51-50, tras un debate de más de 24 horas en el que tres de los 53 senadores republicanos dijeron “no” al presupuesto de Trump. El proyecto busca extender los recortes presupuestarios, imponer mayores restricciones al gasto público y aprobar mayores fondos para defensa y el control migratorio.
Esos últimos fondos implicarían un incremento de 3,3 billones de dólares a la deuda pública dentro de 10 años, según un nuevo estimado de la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO), un cálculo que supera los 2,4 billones de dólares de la versión aprobada el 22 de mayo la Cámara Baja. El aumento del déficit fue el principal obstáculo que enfrentó la propuesta entre el ala más conservadora del partido Republicano.
Musk, desde que salió de la Casa Blanca a fines de mayo, se transformó en un crítico del aumento del gasto propuesto por Trump y desde la presentación del proyecto de presupuesto se encargó de calificarlo como “masivo, escandaloso y lleno de gastos innecsearios”.
Trump no dejó de responder a cada ataque de su antiguo aliado y aportante de la campaña presidencial. Esta mañana, apuntó directo contra el dueño de Tesla y Space X le recordó que si se acabaran los subsidios estatales también se acabarían “los lanzamientos de cohetes, los satélites y la producción de coches eléctricos, y nuestro país ahorraría una fortuna”.
“Puede recibir, con diferencia, más subsidios que cualquier otra persona en la historia, y sin subsidios, probablemente tendría que cerrar y regresar a Sudáfrica”, remató Trump en clara advertencia al magnate por su dura oposición contra el presupuesto.
La respuesta del presidente norteamericano llegó luego de Musk pidiera el lunes a los senadores republicanos que no voten el endeudamiento solicitado por Trunp: “A cada miembro del Congreso que hizo campaña sobre reducir el gasto gubernamental e inmediatamente votó por el mayor incremento de la deuda de la historia, debería caérsele la cara de vergüenza. Y perderán sus primarias el año que viene aunque sea lo último que haga en esta Tierra”, escribió.
Cortesía de Página 12
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