Científicos que exploraban la selva en las tierras bajas de La Paz, Bolivia, descubrieron por primera vez en el país un ejemplar de serpiente bejuco Inkaterra (Oxybelis inkaterra). El hallazgo fue producto de un accidente, puesto que uno de los guías que acompañaba la expedición cortó sin querer al animal mientras abría paso en la vegetación.
El hallazgo de este curioso y escurridizo animal fue publicado en 2024 en la revista Herpetozoa. De acuerdo con la publicación, el ejemplar medía 1.2 metros de largo y presentaba una mezcla de colores gris, marrón y blanco, gracias a la cual pudo camuflarse en una rama, lo que impidió que el guía pudiera detectarla. Pero sin duda su característica más destacada era su cabeza puntiaguda.
La investigación
El incidente que dio lugar al importante hallazgo ocurrió en 2015. La expedición tenía como objetivo encontrar ejemplares de serpientes bejuco y serpientes de hocico afilado, especies que por lo general son muy esquivas. De acuerdo con el estudio, mientras se abría paso por un sendero cerca del campamento del equipo, el guía “cortó en pedazos” a la serpiente.
Los científicos creen que la serpiente probablemente se sintió amenazada por la presencia humana , por lo que permaneció inmóvil para imitar una de las ramas del arbusto en el que se encontraba, lo que impidió que el guía la viera. Fue solo cuando los investigadores examinaron el cadáver del animal que pudieron identificar que se trataba de una especie nueva en el país: Oxybelis inkaterra.
Hábitat y características
Hasta el momento del hallazgo, la Oxybelis inkaterra solo había sido vista en Perú y Ecuador. En una revisión posterior, el equipo también encontró archivos de museo que mostraban dos ejemplares adicionales recolectados previamente en Bolivia, uno fechado en 2005 y otro sin datos exactos de ubicación ni año.
De acuerdo con Latinamerican Post, las serpientes bejuco son conocidas por su naturaleza cauta y críptica. Su dieta incluye pequeños vertebrados, como lagartijas, aves, anfibios y mamíferos. Durante su investigación, el equipo, liderado por Luis R. Rivas, también documentó otras dos especies de serpientes bejuco ( O. aeneus y O. fulgidus), así como dos serpientes de hocico afilado (Xenoxybelis argenteus y X. boulengeri).
Cortesía de Xataka
Dejanos un comentario: