Andy quiere dejar la revocación de mandato para 2028 y así medir fuerzas al interior de la 4T de cara al 2030

 El obradorismo duro no quiere ubicar la revocación de mandato de Claudia Sheinbaum en las elecciones intermedias del 2027. Así lo habría compartido Andy López Beltrán a su entorno más cercano. Tiene lógica porque, en su aspiración presidencial, 2028, como es originalmente, le daría la posibilidad de ganar terreno frente a los planes sucesorios de Palacio, especialmente si el resultado en las elecciones de medio termino no fuera el ideal.

Para el secretario de Organización de Morena, el entorno presidencial pretende, en el 2027, sumar gobernadores propios y revalidar a Sheinbaum en las casillas, de modo de que luego disputarle centralidad se vuelta imposible. Así se lo comentó Daniel Asaf a algunos compañeros de bancada en San Lázaro.

Ramírez Cuellar, por su parte, no cree tanto en la viabilidad del cambio de fecha, sino que utilizaría la iniciativa para poder observar cuáles son los aliados de Palacio y quienes, de momento, prefieren ser esquivos.

No por nada este miércoles compañeros de su bancada le consultaron quién querría debatir realmente la revocación y Ramírez Cuellar respondió que la tensión, desde ya, está al interior del oficialismo.

Todo esto sucede con un trasfondo agitado, en el cual en el Gobierno hay quejas por el manejo de la crisis de Michoacán, especialmente con la comunicación del general Ricardo Trevilla que primero admitió que a Carlos Manzo lo cuidaba la Guardia Nacional y ayer martes llegó al punto de decir que el operativo no había fallado.

Michoacán se ha convertido en un punto crítico para el oficialismo porque jugar a fondo contra el narcotráfico implica golpear a aliados de López Obrador, una dicotomía recurrente que ahora adquiera, en la discusión sobre revocación, una nueva temporalidad hacia futuro, donde lo que se discute ya no es el sexenio anterior sino el 2030.

Cortesía de La Política Online



Dejanos un comentario: