“Nuestra Madre Peregrina”, una interpretación tridimensional de la Virgen de Guadalupe, del artista multidisciplinar zacatecano Jorge Ismael Rodríguez López de Lara, es una obra de arte con profundas raíces de fe y cultura mexicana que ha iniciado un periplo por Estados Unidos, convirtiéndose en un punto de convergencia y esperanza para la asediada comunidad migrante.
Ciudad de México, 11 de diciembre (SinEmbargo).– La fe, el arte y la migración convergen en ‘Nuestra Madre Peregrina‘, una escultura de la Virgen de Guadalupe creada en México por el artista multidisciplinar zacatecano Jorge Ismael Rodríguez López de Lara, que recorre en estos días aciagos distintas ciudades de Estados Unidos como un poderoso botón de esperanza, reivindicación cultural y sobre todo de resistencia.
“Es una representación que hice de la Virgen de Guadalupe, una interpretación tridimensional en donde busqué que hubiera una similitud alta en relación a la imagen que conocemos, la imagen del ayate y que tuviera la sensación de ser una persona viva”, comentó Rodríguez López de Lara a SinEmbargo.



La escultura, concebida para sentirse como “una persona viva” a través de un detallado trabajo que incluye cabello natural donado y ojos utilizados como prótesis humanas, partió de México y ya suma un impacto apoteósico. Tras iniciar su recorrido en el santuario Guadalupano de Chicago y visitar otras parroquias en zonas de migrantes, con cerca de 200 mil visitas, se encuentra actualmente en la icónica Catedral de San Patricio en Nueva York, el principal símbolo del catolicismo en Estados Unidos, un país mayoritariamente protestante durante su fundación.
“La experiencia de su peregrinar ha sido muy interesante. Empezó en el santuario Guadalupano de Chicago y después fue a St. Gall y después a Madre de las Américas, otras dos parroquias católicas también de Chicago que están en zonas de migrantes mexicanos […] . Ahora está en San Patrick, en la catedral que está en Nueva York y también ha sido muy visitada, muy referida también”, comentó Jorge Ismael.
Cortesía de Sin Embargo
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