Claudio Segovia, escenógrafo, director de teatro y cocreador del trascendental espectáculo Tango argentino que conquistó desde 1983 los escenarios más importantes del mundo, murió este domingo a los 92 años.
Nacido en 1933, Segovia creó en conjunto con Héctor Orezzoli ese homenaje escénico al típico ritmo del Río de la Plata que triunfó en la Argentina y llegó a Broadway, donde logró varios premios Tony y fue un motor de reconocimiento internacional para el tango.
Su carrera comenzó a fines de los ‘60 en Buenos Aires y no paró de cosechar éxitos en Europa y Latinoamérica. Desde comienzos de la década del ‘70 –y ya con una gran experiencia como director, escenógrafo y diseñador de vestuario- había comenzado a pensar en una revista de tango. Quería encararla “como un fenómeno teatral y no antropológico ni étnico, pero sí bien arraigado en la experiencia real de sus intérpretes”.
Jamás, a lo largo de diez años, logró interesar en Buenos Aires a ningún funcionario ni productor a los que llevaba su proyecto. Hasta que su amigo y director Jorge Lavelli le acercó la idea al director del Festival de Otoño de París.
El elenco de bailarines estaba constituido por artistas con una trayectoria profesional de varias décadas e incluso con experiencia internacional como Juan Carlos Copes y María Nieves.
Otros, como Virulazo y Elvira, habían bailado en cabarets de todo tipo y en aquel momento vivían de levantar apuestas en la quiniela clandestina. Pero todos ellos habían vivido además el mundo de las milongas durante los ‘40 y los ‘50.
Segovia y Orezzolli acuñaron un término para describir a esta gente: “reo-chic”, es decir, un origen modesto y una gran clase como artistas. Uno de los cantores era Roberto Goyeneche y el actor Jorge Luz formaba parte de la troupe.
El estreno de Tango argentino ocurrió el 11 de noviembre de 1983 en el Teatro de Châtelet de la ciudad de París. La misma noche del estreno les llegaron contratos para girar por Europa y Nueva York. Fue un éxito que posicionó al tango a nivel mundial y lo hizo revalorizar en la propia Argentina.
El pasado 5 de diciembre, Segovia fue distinguido por la Legislatura de la ciudad de Buenos Aires como ciudadano ilustre. “Viajé mucho, me mudé de casas, ciudades y países. Pero siempre volví aquí, y el amor tan profundo que siento por Buenos Aires fructificó en Tango argentino”, dijo ese día.
En 2011 había recibido el homenaje de la Cámara de Diputados. Su carrera incluyó, además, espectáculos como Flamenco puro, Black and Blue, Noche tropical o Brasil brasileiro, que abordaron ritmos populares como la samba, la rumba, el son, el blues y el jazz.
Cortesía de Clarín
Dejanos un comentario: