Más de media tonelada de residuos fueron recolectados este sábado del Río Santa Catarina por el voluntariado estatal Leones en Acción, de la Secretaría de Participación Ciudadana. Con esta intervención, el programa alcanzó un acumulado de 58.7 toneladas de residuos y 788 llantas retiradas del cauce.
En la jornada participaron personal de Fuerza Civil, Protección Civil del Estado y Limpia León. El Secretario de Participación Ciudadana, Daniel Acosta, agradeció a las y los voluntarios y al personal de las dependencias que han participado durante 22 semanas ininterrumpidas.
“El voluntariado no es venir a levantar lo que otros tiraron, es sembrar conciencia sobre el cuidado de lo que es de todas y todos, como el Río Santa Catarina”, expresó Acosta. Gracias a todas y todos quienes han participado en este voluntariado durante 22 semanas consecutivas. Este esfuerzo seguirá cada fin de semana sin excepción”.
Si quieres ser parte de Leones en Acción puedes hacerlo llamando al 070 o consultando las bases en las redes sociales de la Secretaría de Participación Ciudadana.
Un reto para toda la entidad
En Nuevo León, la producción de residuos sólidos representa uno de los principales retos ambientales y urbanos de la entidad. Diversas estimaciones indican que diariamente se generan más de 5 mil toneladas de basura, principalmente provenientes de hogares, comercios y servicios ubicados en la zona metropolitana de Monterrey y otros municipios del estado, esta cantidad equivale a cerca de 1.9 millones de toneladas de residuos al año, lo que dimensiona la magnitud del problema en términos de recolección, tratamiento y disposición final.
Es importante señalar que esta cifra corresponde únicamente a los residuos sólidos urbanos, por lo que no contempla otros tipos de desechos como los industriales, de construcción, hospitalarios o electrónicos, los cuales también se producen en grandes volúmenes y requieren un manejo especializado, en el caso de los residuos electrónicos, Nuevo León genera decenas de miles de toneladas anualmente, incluyendo aparatos en desuso como celulares, computadoras y electrodomésticos, muchos de los cuales contienen materiales contaminantes.
La sobrepoblación es facto clave
El crecimiento poblacional, el consumo elevado y los hábitos de desecho poco sostenibles han incrementado la presión sobre los sistemas de manejo de residuos, aunque el estado cuenta con rellenos sanitarios y una legislación enfocada en la gestión integral de la basura, una gran parte de los desechos no se recicla ni se aprovecha, y termina en sitios de disposición final o, en algunos casos, en tiraderos irregulares, esta situación provoca impactos negativos como la contaminación del suelo, del agua y del aire, además de la emisión de gases de efecto invernadero.
Otro de los retos es la baja cultura de separación de residuos, lo que dificulta el reciclaje y encarece los procesos de tratamiento, a pesar de los esfuerzos gubernamentales y de organizaciones civiles para promover el reciclaje y la economía circular, el aprovechamiento de los residuos sigue siendo limitado frente al volumen que se genera cada año.
Ante este panorama, reducir la cantidad de basura en Nuevo León requiere acciones conjuntas entre autoridades, empresas y ciudadanía, enfocadas en la reducción del consumo, la reutilización de materiales, la separación adecuada de residuos y el fortalecimiento de políticas públicas que impulsen un manejo más sustentable y responsable de los desechos.
Cortesía de El Heraldo de México
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