Las bolsas de valores de México registraron fuertes pérdidas en la penúltima jornada del año. Los índices accionarios locales retrocedieron por segunda jornada consecutiva, ampliando el descenso después de haber registrado un máximo histórico el viernes.
El índice líder S&P/BMV IPC, de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), que agrupa a las acciones locales más negociadas, bajó 1.50% a 64,366.7 puntos, mientras que el FTSE BIVA, de la Bolsa Institucional de Valores (Biva), cayó 1.43% a 1,273.99.
A pesar de la caída, en el año los índices presentan ganancias en el año, S&P/BMV IPC avanza 30% y el FTSE BIVA con 26.79 por ciento.
Al interior del índice de referencia, la mayoría de los valores cerraron con pérdidas. Destacó la caída del operador bursátil del país, Grupo BMV, con 3.87% menos a 36.97 pesos, seguido por la minera Industrias Peñoles, que retrocedió 3.26% a 950 pesos.
Los mercados en Estados Unidos cerraron con ligeras pérdidas este martes, tras una jornada de operaciones cercanas a la línea plana y luego de la publicación de las minutas de la reunión de diciembre de la Reserva Federal (Fed).
El Promedio Industrial Dow Jones, integrado por las acciones de 30 gigantes, bajó 0.20% a 48,367.06 puntos, mientras que el S&P 500, de las empresas más valiosas, perdió 0.14% a 6,896.24 puntos. El Nasdaq Composite tecnológico bajó 0.24% a 23,419.08 puntos.
“Este desempeño se dio después de que se dieron a conocer las minutas de la última reunión del año de la Fed, celebrada los días 9 y 10 de diciembre, las cuales revelaron un debate más dividido de lo anticipado en torno al reciente recorte de 25 puntos base”, aseguran analistas de GBM.
Dicho ajuste fue aprobado por una votación de 9 a 3 que llevó la tasa objetivo a un rango de 3.50-3.75%. “Si bien la mayoría de los miembros de la Fed consideró apropiados ajustes adicionales si la inflación continúa cediendo, varios advirtieron que el margen para nuevos recortes es limitado y podría requerir una pausa prolongada”, añadieron.
Además, el Comité Federal de Mercado Abierto reconoció riesgos a la baja para el empleo y presiones inflacionarias al alza, lo que complicó el panorama para la toma de decisiones ante la falta de información completa debido al reciente cierre del gobierno estadounidense. (Con información de José Rivera)
Cortesía de El Economista
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