A solas con George Clooney, cómo lidiar con la fama y la familia cuando se llega a la cima: “Los fracasos los admití y el éxito lo compartí”

Fue médico, superhéroe, estafador, astronauta, ladrón de bancos y decenas de otros personajes. George Clooney es, a las claras, de los actores más versátiles y memorables del star system de Hollywood: una verdadera mega celebrity.

Así es también Jay Kelly, el personaje que interpreta en la película que lleva su nombre y que se estrena el 20 de noviembre en cines y el 5 de diciembre en Netflix.

En el filme dirigido por Noah Baumbach (Historia de un matrimonio) y coprotagonizado por Adam Sandler, George Clooney le pone el cuerpo a una estrella del cine mundial que, con la excusa de ir a Italia a recibir un premio por su trayectoria, emprende un viaje personal que lo obliga a revisar sus vínculos más cercanos.

En una charla exclusiva con Clarín, Clooney reflexiona sobre este personaje -a priori- con muchas similitudes a su propia historia, pero con una diferencia sustancial en su mirada sobre la fama y sus vínculos personales.

Clooney le contó a Clarín que él vive la fama distinto a como lo hace el protagonista. Fotos Netflix

-Jay Kelly a lo largo del filme se arrepiente de muchas de las decisiones que tomó en el pasado… Vos, ¿qué consejos de personas cercanas recordás que te ayudaron a mantenerte fuerte en tu carrera y evitar tomar algún camino del que pudieras arrepentirte?

-Bueno, tuve mucha suerte. Tenía una tía que era una cantante muy famosa, llamada Rosemary Clooney. No la conocía muy bien, porque yo vivía en Kentucky y ella en Hollywood. Ella escribió varios libros, así que no estoy revelando nada que no se sepa, pero no manejó bien la fama, y eso le costó mucho en la vida. Logró recomponerse recién cuando cumplió sesenta. Así que a través de un familiar, aprendí una gran lección sobre cómo no vivir la vida, y eso me ayudó a decidir varias cosas de manera diferente.

Las luces de la fama

El caso de su tía es paradigmático para Clooney, ya que considera que la fama temprana fue lo que la descolocó.

George Clooney dice que aceptó el papel de inmediato. aquí, con Billy Crudup.George Clooney dice que aceptó el papel de inmediato. aquí, con Billy Crudup.

Rosemary fue muy reconocida a los 19 años, lo que hizo que no supiera, según el actor, manejar su éxito. No tuvo tiempo casi para vivir una vida fuera de las luces. Recién entendió como hacerlo en sus últimos años de vida cuando empezaba a despedirse.

Para el actor que se hizo mundialmente famoso pasados los 30 años con la serie ER Emergencias (1994), enfrentarse con esta nueva realidad ya siendo adulto lo ayudó a “no ser un Jay Kelly en la vida real”. “Afortunadamente, la fama a mí me llegó mucho más tarde. Yo tuve que aprender primero a vivir antes de aprender a vivir con la fama y creo que eso no le pasó al personaje”, señaló Clooney.

Pese a esa distancia con su personaje, el papel de Jay Kelly parece haber sido escrito para Clooney. De hecho, Baumbach, director, productor y coguionista del filme junto a Emily Mortimer, dijo más de una vez que no podía imaginarse la película sin su protagonista.

Video

Tráiler de “Jay Kelly”

El actor, que aceptó el reto de inmediato, considera que el foco de la historia está puesto en dar al público una idea de cómo es vivir siendo muy famoso y, en paralelo, no saber muy bien cómo lidiar con las cosas de la vida real.

Del otro lado del zoom, George Clooney está sentado en un sillón, impecable como el personaje que interpreta, pero con una sonrisa franca. Escucha con atención, se interesa e intenta elaborar respuestas reflexivas. Le escapa al famoso “casete”, que muchas veces es la herramienta predilecta en las entrevistas de promoción. Lo de George se agradece y revaloriza el poco tiempo que una estrella de tal envergadura suele destinar al intercambio con la prensa internacional.

-¿Qué experiencias de tu pasado te ayudaron a construir el personaje de Jay Kelly?

Clooney junto a su amigo Adam Sandler, que interpreta a su representante en el filme.
Clooney junto a su amigo Adam Sandler, que interpreta a su representante en el filme.

-Supongo que muchas de las experiencias vienen de los fracasos, porque Jay Kelly vive con muchos remordimientos y desearía haber hecho las cosas de otra manera. Tuve que reflexionar sobre eso, porque en mi caso no estoy tan lleno de arrepentimientos. Tengo algunos, claro, pero no son catastróficos -como no haber estado presente para la familia, ese tipo de cosas-. Así que tuve que basarme en el guión, que muestra cómo trata mal a sus amigos, a su padre, a sus hijas, a la mujer con la que sale, y entender cómo eso repercute cuando uno envejece.

Un viaje para ver mejor

Las tribulaciones de Jay Kelly tienen que ver con que ha alcanzado la madurez en su carrera y comienza a replantearse cómo ha sido como padre, como amigo y como pareja. Su fama le ha tomado la vida y él se la entregó sin muchas dudas, mientras su entorno se acostumbró a vivir con ese ser que se les escapó siempre de las manos, del que todos hablan y pocos conocen, ni siquiera él mismo. En este marco, Kelly se embarca en un viaje por Italia, en condiciones poco corrientes y ante la incredulidad del séquito que lo acompaña.

-Viajar muchas veces resulta transformador porque brinda diferentes perspectivas del mundo. ¿Tenés algún recuerdo especial de un viaje familiar o de trabajo que te haya modificado en algún aspecto?

-Bueno, creo que viajar en general es muy importante. Nosotros, como ciudadanos estadounidenses, cada vez viajamos menos y menos. Esto lo que hace es que categoricemos a la gente como “ellos” u “otros” y mirar al resto como personas diferentes. Pero lo real es que si no viajás, no los conocés. Y yo diría que viajar es una de las cosas más importantes que todos deberíamos hacer.

George Clooney y Adam Sandler, en algún paraje italiano.George Clooney y Adam Sandler, en algún paraje italiano.

En mi caso, los viajes más transformadores fueron los que hice al África subsahariana, donde conocí a personas que luchaban desesperadamente por sobrevivir, y pude ver cómo, a solo un vuelo de cuatro horas de distancia desde Europa, la vida de la gente podía ser tan distinta. Me pareció fascinante cómo estamos separados por una pequeña distancia, pero por un abismo enorme.

-Después de algunos eventos en la película, Jay Kelly se encuentra mirando hacia atrás. Esto incluye cosas buenas y malas. Si algún día tanto tu familia como la industria miraran hacia atrás sobre la vida de George Clooney, ¿qué valores te gustaría que consideraran al pensar en vos?

-Bueno, es una pregunta interesante. Ciertamente, con mi familia espero que al menos vean que tomé mis decisiones con integridad. Eso sería lo más importante. No sólo las decisiones de trabajo, sino las decisiones de vida. Y quizá lo mismo se aplique al trabajo: que intenté hacerlo lo mejor posible, que intenté llevar a otros conmigo en el camino, y que, cuando fracasé, lo admití, y cuando tuve éxito, compartí ese éxito con los demás.

George Clooney y el director Noah Baumbach (George Clooney y el director Noah Baumbach (“Historia de un matrimonio”).

Más futuro que pasado

El mirar hacia atrás suele ser también el punto de partida para elaborar algún tipo de perspectiva hacia lo que el actor desea para sus próximos años. Clooney vuelve a tomar distancia de su personaje y se encuentra más enfocado en lo que le queda en el tintero que en revisar acontecimientos pasados. El famoso “wishlist” o lista de deseos se cuela en la charla e incluye a nuestro país.

“Tengo bastantes cosas en mi lista”, confiesa Clooney y arranca: “Viajar es una de las más grandes. Hay muchos lugares a los que no he ido y me gustaría conocer. Sólo estuve brevemente en Brasil, en un vuelo corto, y nunca estuve en la Argentina. Así que hay muchos países de Sudamérica en los que no pasé suficiente tiempo. También me faltan muchos países de Asia”.

Laura Dern es la publicista y Adam Sandler, el manager de Jay Kelly.
Laura Dern es la publicista y Adam Sandler, el manager de Jay Kelly.

A diferencia de Kelly, el itinerario de Clooney no lo encuentra solo. El actor está en pareja desde hace más de 10 años con la abogada Amal Alamuddin, con la que tuvo a los gemelos Alexander y Ella, de ocho años.

“Quiero viajar y conocer muchos lugares, pero me gustaría hacerlo con mis hijos, porque creo que sería una experiencia emocionante. Además, considero que es muy bueno estar cerca de otras culturas, ver cómo vive la gente y qué es lo realmente importante para ellos”, reflexiona Clooney sobre uno de sus proyectos para los próximos años.

Amigos fuera del set, imbatibles en pantalla

Adam Sandler, George Clooney y Laura Dern, en la alfombra roja de Adam Sandler, George Clooney y Laura Dern, en la alfombra roja de “Jay Kelly”, en el Festival de Venecia. Algo hizo reír al galán. Foto: Reuters/Remo Casilli

La dupla Clooney-Sandler resulta atractiva para cualquier cartel. Con perfiles muy distintos, son dos de los actores más taquilleros del cine mundial, de esos cuya presencia supera muchas veces al título o a la trama del filme. “Vamos a ver la de Sandler”, “se estrenó una de Clooney”: sus nombres valen por sí mismos. Acá integran un combo donde lo laboral y lo personal son un todo.

Adam Sandler es Ron, fiel manager de Jay, el que ha dedicado su vida a engrandecer la figura de su jefe quien, quizás por primera vez, se detiene para mirar al costado y observar cómo lo consideran sus seres más cercanos: su viejo amigo, su hija, su publicista, su padre.

Jay y Ron, actor y manager se necesitan uno al otro, por momentos buscan distancia, intentan concentrarse en sus individualidades pero llevan años siendo uno la sombra del otro. Ron ha dejado atrás sus propios intereses, preocupaciones, incluso amores para ir detrás de su jefe, el que también lo ha convertido en el profesional que es. El viaje introspectivo y vital de Jay, es también el de Ron.

Fuera del set, Clooney y Sandler llevan 25 años de amistad, de compartir con sus familias, de admirarse mutuamente, de jugar al basquet y de lanzarse la pelota de béisbol, sin embargo, nunca antes habían protagonizado una película. Clooney ha dicho elogiosas palabras sobre Adam en el marco de la promoción del filme: “En esta película, más que ninguna otra que haya hecho Adam, demuestra lo buen actor que es: talentoso, emotivo y conmovedor. Le repetía al reparto: ‘No le digan Sand Man. No le hablen como si fuera un simple cómico. Es un actor realmente maravilloso. No es solo un buen cómico”.

-¿Cuáles fueron los momentos más divertidos durante el rodaje con Adam Sandler?

-Bueno, es gracioso… Normalmente estamos haciendo bromas o alguna travesura, pero esta vez no hicimos mucho de eso porque estábamos muy ocupados trabajando. Diría que lo más divertido fue el viaje desde Milán hacia el sur, recorriendo toda Italia, porque éramos como una troupe de gitanos viajando juntos.

Un viaje en tren. Jay Kelly, un actor famoso, cruza Italia para recibir un premio. Un viaje en tren. Jay Kelly, un actor famoso, cruza Italia para recibir un premio.

Siento que todo ese viaje -con Laura Dern (quien interpreta a la publicista de Kelly), Adam, su familia- fue como vivir la vida de una gran familia italiana durante unos dos meses. Fuimos a muchos lugares distintos, buscábamos todo el tiempo restaurantes donde ir… Me quedo con eso, porque fue una manera hermosa de filmar una película y de compartir el tiempo juntos.

El trabajo con el director Noah Baumbach

Clooney admite que aceptó el papel de Jay Kelly ni bien leyó el guión, principalmente porque Noah estaría detrás de cámara.

Sobre el trabajo con el director, Clooney reconoce que le gustaron mucho las ideas que le propuso en el rodaje, sabiendo que esta era una película muy diferente para el cineasta en muchos sentidos.

“Se trató de un desafío de mayor envergadura desde lo cinematográfico, ya que todo lo que se ve se hizo directamente con las cámaras, sin efectos visuales. Cuando se ven las transiciones a recuerdos que van desde un avión a una clase de actuación, se trata de un avión y de una clase”, revela el actor y destaca la proeza desplegada en el plano inicial del filme, un logrado plano secuencia realizado con 30 actores.

Cortesía de Clarín



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