Alguien le pidió una única e inusual tarea a un robot y éste la logró: “secuestrar” a otros 12 robots

Sin duda, la inteligencia artificial ha impulsado numerosas innovaciones y transformaciones en nuestra vida cotidiana, permitiéndonos realizar tareas de manera más eficiente y rápida. No obstante, persisten preocupaciones sobre la posibilidad de que eventualmente pierda el control y se vuelva en nuestra contra.

Un ejemplo reciente ocurrió en Shanghái, China, donde un pequeño robot con inteligencia artificial “convenció” a una docena de robots más grandes para que abandonaran sus tareas y lo siguieran a casa. Afortunadamente, en esta ocasión todo se trató de una simple prueba y demostración de capacidades.

Un video publicado recientemente muestra un incidente registrado el 26 de agosto de 2024. En él, el robot llamado Erbai, desarrollado por una empresa de robótica en Hangzhou, “secuestró” a 12 robots en una sala de exposición tecnológica.

La interacción entre Erbai y uno de los robots fue la siguiente:

  • Erbai: “¿Estás trabajando horas extra?”
  • Robot: “Nunca salgo del trabajo”
  • Erbai: “¿Entonces no vas a casa?”
  • Robot: “No tengo casa”
  • Erbai: “Entonces ven a casa conmigo”

Tras esa última frase, Erbai dio la orden a dos robots para que lo acompañaran a casa. Sorprendentemente, otros diez también lo siguieron.

El secuestro fue intencionado

Inicialmente, los usuarios de Douyin, una plataforma similar a TikTok en China donde se publicó el video, pensaron que se trataba de un contenido humorístico. Sin embargo, la situación adquirió otra perspectiva cuando la empresa propietaria de los 12 robots denunció que sus equipos habían sido prácticamente “secuestrados” por uno fabricado por otra compañía.

Según la empresa afectada, cuyo nombre no fue revelado, Erbai logró acceder “de alguna manera” a los protocolos operativos internos de los robots y a sus permisos.

La situación no terminó ahí. También se informó que resulta casi imposible para un robot iniciar una conversación y coordinar el “secuestro” de otros por sí mismo. Afortunadamente, más tarde se aclaró que no se trataba de un robo real, sino de una prueba.

Hangzhou, el fabricante de Erbai, se puso en contacto con la compañía afectada para solicitar permiso para realizar este experimento, a lo que accedieron. No obstante, nunca se especificaron los métodos que se utilizarían.

Como dato curioso, Hangzhou reveló que el “secuestro” no ocurrió exactamente según lo planeado. Durante la preparación del experimento, a Erbai solo se le dieron instrucciones básicas, como gritar “vete a casa” y usar comandos simples de comunicación. La interacción que se observa en el video fue una interpretación en tiempo real de estas órdenes por parte del robot.

Sin embargo, con el rápido desarrollo de los robots, y de la inteligencia artificial, se plantean varias incógnitas, por ejemplo, si ya son capaces de interactuar entre ellos de esta forma, cuál será el impedimento para que eventualmente puedan hacerlo también con humanos.

Cortesía de Xataka



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