La situación de orden público en el departamento del Cauca sigue siendo crítica, como ha sido históricamente en esta región. La Operación Perseo, desplegada por el Gobierno Nacional desde el pasado sábado en el corregimiento de El Plateado, municipio de Argelia, ha generado múltiples retaliaciones por parte de disidencias de las antiguas Farc, lo que mantiene en constante alerta a las fuerzas militares y de policía.
Recientemente, se conoció que el sanguinario cabecilla del Frente Carlos Patiño, alias Giovanny, ordenó la ejecución de un plan pistola dirigido a atacar, hostigar y atentar contra la Fuerza Pública en El Plateado.
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El plan, en poder de inteligencia militar, consiste en que los disidentes comentan los atentados vestidos de civil, tomando por sorpresa a los militares. Lo grave es que la orden fue emitida pese al riesgo de que los ataques ocurran en medio de la población civil.
“Esta acción criminal pondría en grave riesgo la vida e integridad física de los pobladores de El Plateado, especialmente de niños y mujeres, ya que al atacar de manera indiscriminada a la Fuerza Pública podría afectar o herir gravemente a quienes hasta hace unos días él aseguraba que eran sus aliados y a quienes decía que ayudaría en lo que necesitaran”, según información militar.
Adicionalmente, se conoció que los planes criminales también estarían dirigidos a atentar contra los comerciantes del territorio. Al parecer, alias Giovanny ordenó cometer varios asesinatos contra quienes, según él, estarían entregando información sobre su paradero.
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Por este cabecilla criminal, las autoridades ofrecen una recompensa de hasta 100 millones de pesos a quien suministre información que pueda conducir a su ubicación.
Las Fuerzas Militares detallan que los interesados en entregar información pueden hacerlo llamando a la Línea Gratuita Nacional 107 Contra el Terrorismo, disponible las 24 horas del día. Las autoridades garantizan absoluta confidencialidad para quienes informen sobre la presencia o ubicación de integrantes de las disidencias en el Cañón del Micay.
Una vez conocido el plan pistola, el Ejército y la Policía fortalecieron sus dispositivos de seguridad en la zona para evitar que estas acciones se materialicen.
Cortesía de El Colombiano
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