Así es el coche que combina espíritu aventurero, tecnología avanzada y autonomía pensada para viajar sin preocupaciones

El nombre Explorer siempre ha estado asociado a aventura, libertad de movimiento y espíritu inconformista. Durante décadas, este modelo ha representado la idea más pura del SUV al estilo americano: grande, robusto y preparado para llegar donde otros no podían. Sin embargo, el mercado europeo actual exige algo más que presencia y carácter. Pide eficiencia, tecnología y una movilidad cada vez más sostenible. Con el nuevo Ford Explorer eléctrico, la marca del óvalo da un paso decisivo para reconciliar su ADN histórico con las exigencias del futuro.

Este nuevo Explorer no es una simple adaptación eléctrica de un modelo existente. Es el primer vehículo de una nueva generación de eléctricos desarrollados y fabricados en Europa, pensado específicamente para el cliente europeo, pero sin renunciar al carácter aventurero que siempre ha definido a Ford. Se trata de un SUV 100 % eléctrico de cinco plazas que combina una estética robusta con dimensiones contenidas, una autonomía que supera los 600 kilómetros y una carga ultrarrápida que elimina muchas de las barreras tradicionales del coche eléctrico.

Ford ha concebido este modelo como algo más que un medio de transporte. El Explorer eléctrico es una declaración de intenciones sobre cómo quiere posicionarse la marca en la era de la electrificación: coches prácticos, tecnológicamente avanzados y diseñados para integrarse de forma natural en la vida diaria. A ello se suma una puesta a punto que busca el equilibrio entre confort, dinamismo y eficiencia, alejándose de planteamientos extremos para ofrecer una experiencia de conducción accesible y refinada.

El interior refuerza esta filosofía con un enfoque claramente funcional. La digitalización está presente, pero no abruma; el espacio se aprovecha con inteligencia y cada solución tiene un propósito claro. Desde la gran pantalla central ajustable hasta los múltiples compartimentos de almacenamiento, todo está pensado para facilitar el uso diario, tanto en ciudad como en viajes largos.

Con el Explorer eléctrico, Ford inaugura una etapa clave en su historia europea. Un modelo que no solo mira al futuro, sino que invita a recorrerlo con la misma curiosidad y espíritu explorador que siempre ha caracterizado a la marca.

Un modelo clave para la nueva Ford eléctrica

El Explorer eléctrico es mucho más que un nuevo lanzamiento. Representa el primer paso tangible de la estrategia de electrificación de Ford en Europa, marcando el camino que seguirán los próximos modelos de la marca.

Diseño exterior: robustez reinterpretada

El diseño combina líneas sólidas y superficies limpias para transmitir fortaleza sin resultar excesivo. El frontal impone presencia, mientras que las proporciones compactas lo hacen perfectamente manejable en entornos urbanos europeos.

Carácter americano con precisión europea

Ford ha sabido equilibrar el ADN americano del Explorer con una ejecución más refinada. El resultado es un SUV con personalidad, pero adaptado a las preferencias de diseño y uso del mercado europeo.

Un interior pensado para el confort diario

El habitáculo prioriza el bienestar de los ocupantes. Materiales agradables, una buena insonorización y una distribución lógica de los mandos crean un entorno cómodo y relajado para cualquier trayecto.

La pantalla ajustable como elemento diferencial

La pantalla central de 14,6 pulgadas, deslizante y orientable, es uno de los grandes rasgos distintivos del Explorer. Permite adaptar la visualización a cada conductor y esconde un práctico compartimento de seguridad.

Almacenamiento inteligente para la vida real

La MegaConsola de 17 litros y otros espacios bien integrados demuestran que este Explorer está pensado para el día a día. Guardar objetos grandes o pequeños resulta sencillo y práctico.

SYNC Move y una experiencia digital intuitiva

El sistema SYNC Move ofrece conectividad total, control por voz y una interfaz clara. La tecnología está presente para ayudar, no para complicar la conducción.

Autonomía pensada para viajar sin límites

Con más de 600 kilómetros de autonomía y hasta 789 km en uso urbano en la versión de tracción trasera, el Explorer eléctrico elimina gran parte de la ansiedad asociada al coche eléctrico.

Prestaciones eléctricas con carácter

La versión de tracción total acelera de 0 a 100 km/h en 5,3 segundos, ofreciendo una respuesta contundente que sorprende en un SUV familiar y refuerza su carácter dinámico.

Carga ultrarrápida para el día a día

Gracias a la carga rápida, es posible pasar del 10 al 80% en unos 26 minutos, facilitando tanto los viajes largos como el uso cotidiano sin largas esperas.

Seguridad y asistentes de última generación

Más de 15 sistemas de asistencia a la conducción trabajan para aumentar la seguridad y reducir el cansancio al volante. Desde la cámara de 360 grados hasta el cambio de carril asistido, todo suma tranquilidad.

Un SUV eléctrico con espíritu aventurero

El Explorer eléctrico demuestra que electrificación y aventura no son conceptos opuestos. Es un SUV moderno, eficiente y preparado para acompañar a quienes quieren explorar nuevas rutas sin renunciar a la comodidad.

El Ford Explorer eléctrico marca un antes y un después para la marca en Europa. Combina autonomía real, tecnología bien integrada y un diseño con personalidad en un conjunto pensado para el uso diario y los viajes largos. No pretende ser el más radical ni el más llamativo, sino uno de los más coherentes. Un SUV que mantiene vivo el espíritu explorador de Ford y demuestra que el futuro eléctrico también puede ser práctico, emocionante y fácil de disfrutar.

Cortesía de Muy Interesante



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