“Hoy me reuní con varios de mis respetados compañeros de lucha política y partidaria para conversar sobre los enormes retos de nuestro país y sus soluciones en el diálogo y acuerdos políticos”, escribió la semana pasada en sus redes sociales el senador priista Manlio Fabio Beltrones, agregando una foto con los 11 personajes en cuestión.
Se trató de un espaldarazo de exdirigentes del PRI a Enrique Ochoa Reza ante la “injusta expulsión del PRI”, agregó Dulce Sauri Riancho en sus respectivas redes sociales, en referencia al proceso que promovió Alito Moreno Cárdenas. “Lucharemos para que el TEPJF [Tribunal Electoral] corrija esta injusticia”, sentenció la priista yucateca, una de las asistentes al convite en la Ciudad de México.
“Coincidimos en nuestro extrañamiento por el torpe proceso con el que la dirigencia del PRI intenta expulsar al ex presidente Enrique Ochoa por ‘atentar contra la unidad del partido’ debido a su posición crítica de no reelección. Absurdo, pues!”, afirmó Manlio Fabio.
Además de los antes mencionados (Beltrones, Sauri y Ochoa) en la lista de los presentes, todos disidentes a la actual presidencia nacional del PRI y opositores a la reelección de Alito Moreno, se pueden leer los nombres de Pedro Joaquín Coldwell,
Aurelio Nuño, José Ramón Martel
y Fernando Lerdo de Tejada. Igualmente participaron el exgobernador de Nuevo León, José Natividad González Parás, y exmandatario de
Chihuahua, José Reyes Baeza.
Destacó la presencia de Héctor Astudillo, exgobernador de Guerrero y el único que oficialmente ha dejado las filas del PRI con Alito a la cabeza. Incluso en su momento, luego de perder la gubernatura y entregarla a Evelyn Salgado en 2021, se habló de que se iría a una embajada como el resto de sus compañeros de partido que sí aceptaron (Omar Fayad de Hidalgo y Claudia Pavlovich de Sonora, por poner un par de nombres).
En alianza con el Verde y PT, Morena busca destronar al PRI en Durango
Estos viejos lobos de mar no pudieron evitar hablar de política y sobre la siguiente elección del 1 de junio, donde estarán en juego las 39 presidencias municipales de Durango y las 212 alcaldías de Veracruz. En 2019, a un año del tsunami de López Obrador y Morena, el PRI triunfó en ambos estados, ya sea solo en Durango o en coalición con el PAN como en Veracruz.
Pero de acuerdo con el análisis que se reveló en aquella reunión, Morena no era el partido político que es ahora (una máquina de ganar elecciones), y el liderazgo morenista de Alfonso Ramírez Cuéllar era tan endeble entonces que ni por equivocación podría compararse con el poder que reúnen Luisa María Alcalde y Andy López Beltrán al despuntar el 2025.
De ahí explican entre los expresidente del PRI que el gobernador Esteban Villegas sea tan cercano a Palacio Nacional y ya adelantó que firmará el convenio del IMSS-Bienestar para federalizar los servicios de salud, luego de años -la mitad de su mandato- en los que cooperó con la 4T pero no como ahora. La presidenta Claudia Sheinbaum no puede estar más feliz con el PRI, sabiendo además que podrían ganar la capital del Durango e iniciar por fin la transformación en el estado que nunca ha tenido alternancia partidista, ni con AMLO dirigiendo los rumbos de este país.
Cortesía de La Política Online
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