Cadillac acaba de confirmar el arribo de su primer SUV grande totalmente eléctrico a México. Se llama Escalade IQ y, más allá del nombre, lo que promete es un nuevo nivel de sofisticación. Tendrá un precio base de 3,327,900 pesos y está diseñada para cambiar por completo la experiencia de movilidad en un vehículo de más de cinco metros de largo. Cuenta con 750 caballos de fuerza, hasta 740 kilómetros de autonomía y una lista de tecnologías que no se habían visto juntas en ninguna SUV eléctrica de lujo vendida en el país.
General Motors comenzará su comercialización en septiembre de este mismo año, con dos versiones. La Escalade IQ y la IQL, esta última ligeramente más larga. Ambas comparten el mismo tren motriz: batería de 200 kWh, doble motor eléctrico, tracción integral eAWD, carga rápida y suspensión neumática adaptativa. Las dos se fabrican en Estados Unidos, en la planta Factory ZERO de Detroit, y en teoría marcan el comienzo de una nueva etapa para la marca premium estadounidense.
En términos de diseño, Cadillac apostó por una reinterpretación eléctrica de la Escalade que no pierde su esencia. Mantiene una silueta imponente, aunque ahora con líneas más aerodinámicas. La parrilla se transforma en un panel iluminado con acabado cromado obsidiana. Las luces LED verticales al frente y atrás siguen ahí, pero con una firma visual más expresiva. Los rines de 24 pulgadas tienen corte diamante, mientras que las puertas se abren de forma automática con solo acercarse. El puerto de carga también tiene apertura motorizada.
Cadillac Escalade IQL.
El interior es una cabina tecnológica envuelta en lujo. La pantalla curva de 55 pulgadas recorre todo el tablero, integrando funciones clave del clúster y del sistema de infoentretenimiento. También hay una consola central ejecutiva con mesas plegables, cargadores inalámbricos y pantallas traseras para cada pasajero. El techo de cristal amplifica la sensación de amplitud. Los asientos delanteros y traseros ofrecen masaje, ventilación y calefacción, además de ajustes eléctricos con memoria. La iluminación ambiental puede configurarse en 126 colores.
En conectividad, integra Google de forma nativa y permite reproducir contenido desde Prime Video o Max sin necesidad de teléfono. El sistema de audio AKG incluye 42 bocinas. También cuenta con visión nocturna, detección de peatones y ciclistas, siete bolsas de aire y conducción semiautónoma en estacionamientos. Desde la aplicación MyCadillac es posible revisar el estado de la batería, localizar estaciones de carga y planear rutas con base en la autonomía.
Cadillac Escalade IQ desde el interior.
Cadillac ofrece 8 años de garantía para la batería, tres años de servicios incluidos y acceso preferencial a cargadores rápidos en la red de distribuidores GM. Cada unidad incluye cargador portátil de 19 kW y la instalación doméstica del cargador fijo, con hasta 15 metros de cableado, a través de sus aliados VEMO y Evergo.
Tal parece que Escalade IQ no es solo una SUV eléctrica. Es el nuevo símbolo del lujo norteamericano para el futuro.
Cortesía de Xataka
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