Durante la decimoquinta etapa de la Vuelta a España se vivió un feo episodio cuando un activista propalestino irrumpió en la carrera, se tropezó y terminó provocando la caída de Javi Romo. Tras lo ocurrido, el ciclista español Carlos Verona, del Lidl-Trek, estalló contra este tipo de protestas que están causando el desorden en la prueba por la participación del Israel-Premier Tech.
“Al final es una pena que haya gente que no entienda que realmente la violencia no se puede condenar con violencia y es una pena“, arrancó diciendo el madrileño, que era uno del grupo de escapada de la decimoquinta etapa.
El ciclista del Lidl-Trek mostró su deseo de que “tomen medidas y que las manifestaciones que no son pacíficas se repriman con fuerza” puesto que considera que “hay muchas cosas en juego y según cómo pueden ser la vida del manifestante o de un ciclista. La gente no es consciente y espero que se tomen medidas”.
Todo ocurrió a poco más de 50 kilómetros para la línea de meta, en plena etapa. Javi Romo, corredor del Movistar, se vio sorprendido por ese espontáneo y cayó al suelo, aunque pudo levantarse sin problemas.
Muy enfadado, el español se fue rápidamente a por el manifestante para pedirle explicaciones. Posteriormente, el activista fue arrestado y Romo volvió a la carrera.
Cortesía de 20 Minutos
Dejanos un comentario: