Chelsea se proclama campeón del Mundial de Clubes


El MetLife Stadium se vistió de gala y solemnidad para vivir una final memorable. Bajo el cielo nublado y con la presencia de personalidades de talla mundial, desde el Presidente Donald Trump hasta el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, Chelsea y París Saint-Germain se enfrentaron en un vibrante duelo que marcó el cierre del primer Mundial de Clubes con formato de 32 equipos.

La ceremonia de arranque, acompañada por la interpretación del himno oficial FIFA a cargo de Robbie Williams y Laura Pausini, dio paso al compromiso en la cancha. La emoción continúo en el entretiempo, cuando un show musical sin precedentes con J Balvin, Doja Cat, Tems… y la sorpresa de Coldplay, ofreció un espectáculo digno del Super Bowl, parte del ensayo que la FIFA está preparando para logísticas similares en el Mundial 2026.

Ya en el terreno de juego, Chelsea desató una goleada sorpresiva que terminó con un marcador de 3-0. Cole Palmer se convirtió en la figura indiscutible: abrió el marcador al minuto 22 y amplió la ventaja en el 30, con dos definiciones frías e idénticas que desmoronaron la zaga de PSG.

Apenas antes del descanso, Palmer habilitó a João Pedro, quien con un sutil globito venció a Donnarumma al ‘43, sentenciando una primera mitad demoledora, dándole al cuadro francés dirigido por el español Luis Enrique, una dosis de su propia medicina.

El drama aumentó en el segundo tiempo cuando João Neves fue expulsado al minuto 85 por un gesto antideportivo, reduciendo aún más las pocas esperanzas parisinas.

La solidez defensiva de Chelsea, con Robert Sánchez realizando atajadas clave y su capacidad para aprovechar espacios en transición fueron decisivas para conquistar un título que parecía destinado a los favoritos europeos.

Este triunfo no solo corona a los Blues como primeros campeones de esta edición histórica, sino que también prueba que están listos para los grandes escenarios. Además, este nuevo formato de Mundial de Clubes funciona como una prueba logística ideal para las sedes del Mundial 2026, incluyendo el mismo MetLife Stadium.

Con una exhibición de futbol veloz, organizacional impecable y espectáculo musical de talla global, este torneo promete ser referente en futuros eventos. Por su parte, Chelsea, con su actuación demoledora y una solidez táctica, se coloca entre los equipos más relevantes del planeta.

SV

Cortesía de El Informador



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