Luego de que un grupo de personas encapuchadas agredió a estudiantes utilizando mobiliario y objetos para intentar tomar las instalaciones de un edificio del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), la Universidad de Guadalajara (UdeG) condenó enérgicamente los hechos ocurridos.
Los hechos ocurrieron ayer por la noche cuando un grupo de jóvenes se manifestaba pacíficamente en el CUCSH y los encapuchados les agredieron con mobiliario del plantel y otros objetos.
Hoy, a través de un comunicado, la Casa de Estudios sentenció que la violencia nunca será un camino legítimo para expresar diferencias ni para defender causas dentro de la casa de estudios.
“Estos actos ponen en riesgo la integridad de nuestra comunidad universitaria y atentan contra el espíritu de respeto y pluralidad que caracteriza a la UdeG”, enfatiza.
Por lo pronto, se informó que la Universidad tomará acciones y dará seguimiento a lo ocurrido para garantizar la seguridad de todas y todos sus estudiantes, así como para salvaguardar la vida académica de sus centros universitarios.
“Defender la pluralidad y la diversidad de voces implica también rechazar de manera absoluta la violencia en todas sus formas”, concluye.
Trabajadores universitarios piden seguridad
Más de 800 trabajadores del Edificio de Rectoría de la Universidad de Guadalajara se manifestaron pacíficamente en la explanada del CUCSH, luego de que en las últimas horas se han registrado agresiones por parte de algunos encapuchados.
Los trabajadores, vestidos de blanco, hicieron un llamado al diálogo entre autoridades universitarias y manifestantes, y exigieron seguridad y respeto para poder cumplir con sus actividades laborales.
“La opinión pública y la historia nos ha demostrado que en la Universidad se hace diálogo, se platica y se acuerda”, precisó el secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de la Universidad (SUTUdeG), José Becerra.
Recordó que este miércoles se llevó a cabo un diálogo entre representantes estudiantiles y autoridades de la UdeG para buscar un acuerdo. Sin embargo, ante la falta de consenso, manifestantes bloquearon la entrada del recinto, impidiendo la salida de trabajadores que culminaban con su jornada laboral.
“También tenemos derecho a manifestarnos en cualquier horario y cualquier sede, y más en este que es nuestro espacio de trabajo. Queremos también decirles a ellos ‘déjenos trabajar en paz’, y que nos escuchen también con respeto y podamos manifestarnos sin miedo a ser agredidos”, indicó.
El secretario invitó a los manifestantes a presentar las denuncias correspondientes en caso de haberse sentido agredidos y descartó lesiones de importancia médica entre integrantes de la comunidad universitaria.
Cortesía de El Heraldo de México
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