Colectivos ambientalistas, autoridades municipales y federales, han detectado la modificación de cauces, excavaciones irregulares y construcciones sin permiso (como bodegas, una gasolinera y una cementera), así como tiraderos de escombro en los alrededores de la presa de El Ahogado, ubicada en El Salto, una zona federal que forma parte de la cuenca del río Santiago.
Según el Observatorio sobre Conflictos Socioambientales de la Universidad de Guadalajara, estas irregularidades no solo ponen en riesgo las construcciones ya existentes, sino que también representan un peligro para otras edificaciones cercanas debido a las posibles inundaciones que podrían generarse por los desvíos de caudales y los taponamientos derivados de los tiraderos de escombro.
Alan Carmona, integrante del colectivo “Un Salto de Vida”, denunció que una parte importante de la zona del humedal fue invadida por construcciones no autorizadas y tiraderos. La zona federal de la presa abarca 847.1 hectáreas. “Hemos detectado 200 hectáreas ya rellenadas, y también hay una invasión parcial de 350 hectáreas registradas. Está prácticamente urbanizado, con calles trazadas”, explicó.
El Gobierno de El Salto y la Comisión Nacional del Agua (Conagua) han comenzado con acciones formales para proteger la zona federal, tales como la clausura de construcciones y actividades irregulares tanto en la zona aledaña al Periférico Oriente como en los alrededores de la presa. Algunas de las edificaciones tienen al menos tres años de antigüedad.
Por su parte, la Conagua confirmó que desde 2017, mediante el oficio B00.812.08342, la presa forma parte del Sistema Nacional de Bienes de la Nación, lo que significa que cualquier intervención, uso o construcción en ese espacio debe cumplir con la Ley de Aguas Nacionales.
José Toral, académico de la UdeG e integrante del Observatorio, recordó que la presa El Ahogado da origen al arroyo del mismo nombre, que desemboca en el río Santiago. Por lo tanto, es necesario recuperar este espacio para lograr el saneamiento del Santiago. “Será imposible conseguir la recuperación del río si no se lleva a cabo la recuperación de este humedal. Hay algunas acciones del municipio y de la Profepa (Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente) para sancionar estas actividades ilegales, pero se necesita más”.
Además, alertó que la presa enfrenta no solo estos problemas: es uno de los puntos con los niveles más altos de contaminantes en la cuenca del río Santiago, ya que recibe las descargas de aguas residuales de la industria asentada en la zona.
Graciela González, integrante del colectivo y vecina de la zona, advirtió: “Mientras la cuenca de El Ahogado no tenga atención ni remediación, el río Santiago no se salvará”.
En la cortina de la presa de El Ahogado se encuentra la planta de tratamiento con el mismo nombre, que fue puesta en marcha durante la administración estatal anterior. Con esta planta se espera cumplir la meta establecida y reducir la cantidad de aguas residuales contaminantes que se vierten al Santiago.
Por ahora, la Secretaría de Gestión Integral del Agua del Gobierno de Jalisco informó que la planta opera con una capacidad de saneamiento de hasta dos mil 250 litros por segundo.
Cortesía de El Informador
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