El Betis comenzará su exilio en el estadio de La Cartuja, este viernes (21.30) ante el Alavés, con una mala noticia. El Comité de Disciplina de la Real Federación Española de Fútbol ha sancionado al club andaluz con el cierre parcial de un sector de la grada de La Cartuja por unos incidentes xenófobos ocurridos la pasada campaña en el Benito Villamarín.
El Betis informó este miércoles en un comunicado de esta sanción por parte del Comité de Disciplina de la RFEF, a la que se dará cumplimiento frente al Alavés y que “afectará a unos doscientos asientos” del Estadio La Cartuja. EL castigo es consecuencia de los incidentes registrados en el partido de la pasada liga frente al Athletic Club, cuando dos aficionados emitieron insultos xenófobos hacia algunos jugadores del club vasco cuando se encontraban calentando en la banda del estadio verdiblanco.
“Esta medida llega una vez completado el procedimiento abierto contra el club a raíz de los gritos xenófobos y racistas que profirieron dos aficionados contra jugadores del Athletic Club el pasado mes de febrero, durante el encuentro correspondiente a la jornada 22, disputada en el Benito Villamarín”, explicó en su escrito el Betis.
El club verdiblanco precisó que “el sector damnificado por el cierre ocupará unos doscientos asientos” y que “los abonados afectados recibirán la pertinente comunicación por parte de la entidad”. “El Real Betis Balompié reitera su condena a cualquier comportamiento racista o xenófobo que en ningún caso representa a su afición”, recalcó en su nota el club del barrio de Heliópolis.
El club verdiblanco acata la sanción mientras prepara el monumental lío que supondrá el traslado de cerca de 70.000 aficionados al estadio de La Cartuja. El plan se pondrá a prueba este viernes con un gran despliegue de movilidad que incluye la intervención del Ayuntamiento de Sevilla, Renfe, el propio Betis y la Junta de Andalucía. El Betis tiene 57.000 socios.
Cortesía de El País
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