El presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, volvió a generar controversia este martes al anunciar en una conferencia de prensa desde Mar-a-Lago su intención de renombrar el Golfo de México como “Golfo de América“. Según Trump, esta medida sería un gesto simbólico en respuesta a lo que él percibe como una falta de control por parte de México sobre la migración hacia Estados Unidos y una muestra de liderazgo estadounidense en la región.
“Es un nombre muy bonito y apropiado“, afirmó Trump frente a los periodistas, mientras destacó que esta iniciativa formaría parte de una serie de cambios que planea implementar una vez asuma el cargo el próximo 20 de enero. Según ABC News, Trump justificó esta propuesta al señalar que México “debe dejar de permitir que millones de personas ingresen ilegalmente a nuestro país” y calificó al país vecino como “un lugar muy peligroso, esencialmente dirigido por los cárteles”.
Marjorie Taylor Greene ya prepara legislación para oficializar el cambio de nombre del Golfo
La representante republicana Marjorie Taylor Greene no tardó en respaldar la propuesta de Trump sobre el Golfo de México. Según People, Greene anunció en la plataforma X (anteriormente Twitter) que planea presentar una legislación para hacer realidad el cambio de nombre.
“Presentaré una legislación lo antes posible para cambiar oficialmente el nombre del Golfo de México a su nombre legítimo, ¡Golfo de América!”
Sin embargo, el cambio de nombre enfrenta cuestionamientos no solo a nivel político, sino también histórico. El Golfo de México, nombrado así desde el siglo XVI por exploradores españoles, tiene un significado profundamente enraizado en la historia de la región.
Además, esta porción del Océano Atlántico es compartida por Estados Unidos, México y Cuba, lo que complicaría cualquier intento de imposición unilateral del nuevo nombre.
La denominación oficial de cuerpos de agua internacionales, como el Golfo de México, está a cargo de la Organización Hidrográfica Internacional (OHI). Para modificar un nombre, un país debe presentar una solicitud formal y justificarla con evidencia histórica, cultural o geográfica.
La OHI evalúa estas solicitudes junto con los países involucrados y otros organismos internacionales pertinentes. Como ya se mencionó, el Golfo de México es compartido por Estados Unidos, México y Cuba, cualquier cambio requeriría el consenso de estas naciones.
Cabe recordar que, aunque raros, existen precedentes de disputas por nombres de cuerpos de agua. Por ejemplo, el Golfo Pérsico ha sido llamado ‘Golfo Arábigo’ por algunos países, aunque la OHI reconoce oficialmente ‘Golfo Pérsico’. Otro caso es el Mar de Japón, cuyo nombre Corea del Sur busca cambiar a ‘Mar del Este’, sin alcanzar un consenso internacional.
Claudia Sheinbaum reitera el llamado al diálogo frente a nuevas amenazas arancelarias
Las tensiones entre Estados Unidos y México no se limitan al cambio de nombre del Golfo. Trump también amenazó con imponer un arancel del 25% a los productos mexicanos y canadienses como parte de sus políticas económicas.
Cabe recordar que el pasado mes de noviembre, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, emitió un comunicado oficial en el que destacó los riesgos de esta medida, donde dijo que no es con amenazas ni con aranceles que se atenderá al fenómeno migratorio.
“Se requiere de cooperación y entendimiento recíproco a estos grandes desafíos. A un arancel, vendrá otro en respuesta y así hasta que pongamos en riesgo empresas comunes. Sí, comunes. Por ejemplo, de los principales exportadores de México a Estados Unidos son General Motors, Stellantis y Ford Motor Company, las cuales llegaron a México hace 80 años. ¿Por qué ponerle un impuesto que las ponga en riesgo? No es aceptable y causaría a Estados Unidos y a México inflación y pérdidas de empleo”
La mandataria subrayó que imponer aranceles generaría inflación y pérdida de empleos tanto en México como en Estados Unidos. Esto afectaría a empresas multinacionales como General Motors y Ford que dependen de la cooperación comercial entre ambos países.
Sheinbaum también reiteró la necesidad de abordar el fenómeno migratorio desde una perspectiva integral y propuso que Estados Unidos invierta en desarrollo económico y social en lugar de recurrir a medidas coercitivas:
“Considero que el diálogo es el mejor camino para el entendimiento, la paz y la prosperidad en nuestras naciones, espero que nuestros equipos puedan encontrarse pronto”
Trump no descarta el uso de la fuerza militar para garantizar los intereses de Estados Unidos en el Canal de Panamá y Groenlandia
Además de su polémica propuesta sobre el Golfo de México, Trump expresó durante la misma conferencia su interés por adquirir Groenlandia y recuperar el control del Canal de Panamá. Según Forbes, el presidente electo no descartó recurrir a la fuerza militar o a estrategias económicas coercitivas para lograr estos objetivos. Argumentó que ambos territorios son esenciales para la “seguridad económica y nacional” de los Estados Unidos.
Esta postura revive propuestas anteriores que Trump había lanzado en su primer mandato, incluida la compra de Groenlandia, que en su momento fue rechazada tajantemente por el territorio insular. En cuanto al Canal de Panamá, Trump calificó como un error histórico el tratado que devolvió el control de esta vía a Panamá y responsabilizó al expresidente Jimmy Carter de lo que considera una decisión que debilitó la posición estratégica de Estados Unidos en la región.
Trump endurece su discurso hacia Oriente Medio y el 6 de enero
Durante la conferencia, Trump también lanzó advertencias hacia Hamás y prometió que “se desatará el infierno” si los rehenes israelíes no son liberados antes de su toma de posesión. Según ABC News, el presidente electo evitó dar detalles sobre sus planes, pero dejó claro que sus acciones no serían “buenas para nadie” en la región.
Por otro lado, Trump se negó a comprometerse a no indultar a los responsables de actos violentos durante el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021, lo que generó críticas de diversos sectores políticos. Según Trump, su prioridad será “reconstruir la unidad nacional”, aunque sus comentarios han sido interpretados como un guiño a su base más radical.
Cortesía de Xataka
Dejanos un comentario: