A diferencia de la mayoría de los multimillonarios que permanecieron en las sombras, Elon Musk respaldó con su billetera y su influencia en internet a Donald Trump en su camino a la presidencia de Estados Unidos. La victoria de Trump es también una victoria para las arcas de Musk: las acciones de Tesla, empresa fabricante de vehículos eléctricos, subieron un 15 por ciento el miércoles en la apertura del mercado. Según documentos presentados ante la Comisión Federal Electoral, Musk donó unos 119 millones de dólares para apoyar a Trump, además de aparecer en actos de campaña y concretar una entrevista con el electo presidente en X, su plataforma de redes sociales.
“Una nueva estrella ha nacido:Elon”
La suba del 15 por ciento de la bolsa en las horas posteriores al triunfo de Trump elevó el valor de las 411 millones de acciones que Musk posee de Tesla en más de 15 mil millones de dólares, lo que supone una rentabilidad superior al 12 mil por ciento si se consideran los 119 millones de dólares donados por el empresario durante la campaña, de acuerdo a CNN Business. El director general de Tesla mostró durante toda la campaña un apoyo inquebrantable a Trump a través de su organización política “America PAC”.
Esta organización puso en marcha iniciativas polémicas, como ofrecer incentivos económicos a votantes que atraigan a otros para apoyar una petición de apoyo a la primera y segunda enmienda de la Constitución de Estados Unidos, que protegen la libertad de expresión y el derecho a portar armas. También lanzó una lotería diaria de un millón de dólares para personas que se registren para votar en los estados indecisos.
Trump le rindió homenaje al empresario sudafricano de 53 años en su discurso victorioso del miércoles. “Tenemos una nueva estrella. Una nueva estrella ha nacido: Elon”, aclamó Trump ante una multitud de seguidores. “Estamos juntos esta noche. Es un personaje, es un tipo especial. Es un super genio”, agregó el nuevo presidente estadounidense, quien ya anunció durante la campaña que encargará a Musk una “auditoría” de gobierno con vistas a “reformas profundas”.
Trump promete nombrar al multimillonario director de un nuevo “departamento de eficiencia gubernamental”, o DOGE, que comparte nombre con la criptomoneda vinculada a Musk. Este nombramiento plantearía importantes conflictos de interés, dado el papel esencial de SpaceX en las misiones de la NASA y la dependencia de Tesla de los reguladores gubernamentales, en particular para la tecnología de los autos sin conductor. Además el sistema Starlink de SpaceX desempeña un papel fundamental en el apoyo a las comunicaciones en zonas de guerra y catástrofes de todo el mundo.
Según el diario New York Times, SpaceX y Tesla recibieron al menos 15 mil millones de dólares en contratos gubernamentales en la última década. En un acto en Nueva York, Musk propuso recortar el gasto público anual en dos billones de dólares, sugiriendo cambios drásticos en los servicios públicos como la reducción de las pensiones y la asistencia sanitaria a los jubilados. El exsecretario del Tesoro Larry Summers le recordó que los gobiernos no se gestionan como las empresas. “Respetuosamente, creo que es una estupidez”, dijo Summers en Fox News.
X al servicio de Trump
Forbes estima el patrimonio neto de Musk en 264 mil millones de dólares. Desde que adquirió Twitter y lo rebautizó como X hace dos años, Musk transformó la red social. Estudios recientes indican una mayor visibilidad de los contenidos de derecha, mientras que las publicaciones demócratas y de izquierda vieron reducida su participación. Un análisis del Washington Post reveló que las cuentas republicanas publican con más frecuencia y ganan más seguidores bajo la gestión de Musk.
Musk usó su cuenta con más de 200 millones de seguidores para promover la plataforma de Trump, en particular en temas como la inmigración y las cuestiones transgénero. También difundió teorías conspirativas desacreditadas sobre máquinas de votación manipuladas, argumentos que la campaña de Trump aprovechará si es derrotado. Un análisis del New York Times de las publicaciones de Musk en X durante cinco días del mes pasado reveló que casi un tercio de sus 171 publicaciones contenían información falsa o carecían de contexto.
La hija trans de Elon se exiliará
Vivian Jenna Wilson, la hija trans de Musk, que hace dos años rompió relaciones con su padre y se cambió de apellido, anunció que piensa exiliarse de EE.UU. tras el triunfo de Trump en las elecciones presidenciales. Wilson escribió en su cuenta de Threads (la red social creada por Meta para competir con la X de Musk): “Lo pensé mucho tiempo pero ayer se confirmó. Ya no veo mi futuro en Estados Unidos”.
Wilson, de 20 años, razonó que Trump podría ser pasajero porque solo puede estar cuatro años más al frente de la Casa Blanca, pero “la gente que conscientemente votó por él no va a desaparecer de repente”. La hija de Musk se cambió el nombre (de Xavier Musk) por el de Vivian Jenna Wilson en 2022 y declaró entonces: “Ya no deseo estar relacionada con mi padre biológico de ninguna manera o forma”. Según reportó CNN, la joven tomó el apellido de Justine Wilson, expareja de Musk y madre de cinco de sus siete hijos.
El tratamiento de la transexualidad fue uno de los temas preferidos por la derecha trumpista en campaña, como parte de la “batalla cultural” que dicen tener contra la ideología “woke” (progresista). En sus mitines fue muy frecuente que denunciaran los supuestos “abusos” a los que llevó esa cuestión social, como los pronombres neutros, los cuartos de baño unisex o los deportistas transexuales que arrasan en competiciones femeninas.
Cortesía de Página 12
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