Muchas son las medidas que han surgido en Asia para incentivar el nacimiento de nuevos infantes. Específicamente en Japón, país que mantiene mínimos históricos en índices de natalidad, se ha optado por una idea extrema para que por fin, de una u otra forma, se concilie una relación entre la vida laboral y familiar: guarderías gratis en Tokio.
La encomienda viene por parte de la gobernadora de la capital, Yuriko Koike, quien anunció el plan a finales del año pasado y enfatizó la crisis que atraviesa el país debido al declive en el número de niños. El enfoque, a palabras sencillas, buscará reducir la carga financiera para las familias. ¿Cómo? se extenderá la actual política de guarderías gratuitas a primogénitos.
Como contexto, el Gobierno metropolitano de Tokio adoptó a principios de 2023 una iniciativa similar, pero enfocada de manera exclusiva a los segundos hijos de entre cero y dos años. Con el reciente paso, se busca que se aligeren los costes de crianza desde los primeros hasta segundos y subsecuentes hijos. ¿Para qué? generalizar la gratuidad y salir de la crisis de natalidad.
“No hay tiempo que perder”. Las palabras de Koike resuenan en los distintos esfuerzos por promover la paternidad. Un ejemplo de ello es la reducción de la semana laboral a cuatro días para facilitar la crianza de los hijos. Sí, en otros países se ha implementado para incentivar la productividad, pero ¿qué diferencia hay con Tokio? flexibilizar la jornada para trabajadores con familia.
“Revisaremos los estilos de trabajo con flexibilidad, garantizando que nadie tenga que abandonar su carrera debido a eventos de la vida como el parto o el cuidado de un niño. Ahora es el momento de que Tokio tome la iniciativa de proteger y mejorar las vidas, los medios de subsistencia y la economía de nuestra gente durante estos tiempos difíciles para la nación”.
Yuriko Koike.
Así, mientras la medida de la jornada de cuatro días iniciará a partir de abril de 2025, las guarderías gratuitas para las familias tokiotas tendrá luz verde para el mes de septiembre. La búsqueda de este equilibrio entre el empleo o un bebé, tiene como antecedente la propia cultura de los nipones y su dedicación por completo hacia el trabajo. Lo anterior ha repercutido mayormente en las mujeres ¿Por qué ellas? tienen que elegir entre tener una carrera profesional o una familia.
Todo ello engloba una situación particularmente preocupante en Japón. En 2023, según las estadísticas citadas al principio, nacieron poco más de 727,000 bebés, lo que marca un nuevo descenso en la natalidad. La dificultad para conciliar el trabajo y la crianza impacta especialmente a las mujeres, quienes, de acuerdo con datos del Banco Mundial, destinan un 14.7% del día a labores domésticas no remuneradas. ¿Esto qué provoca? limita aún más sus oportunidades en el ámbito laboral.
Puede que el panorama parezca reiterativo, pero con solo pequeños ajustes. Lo que de primera instancia se muestra como darle mil y un vueltas al mismo tema, en realidad resultan avances que de poco a poco se suman a fin de contrarrestar un crisis prolongada durante años en el país. A mediados de año iniciará esta reciente iniciativa, será cuestión de tiempo para ver si funciona como incentivo para futuros padres.
Cortesía de Xataka
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