En 1987 estrenó aquel filme que afianzó a Arnold Schwarzenegger como una estrella de acción. En medio de una selva centroamericana, se enfrentó a una de las criaturas más emblemáticas de la ciencia ficción. Treinta y ocho años después, Disney ha decidido ampliar esta franquicia ahora con formato de animación y sin duda, vale cada segundo.
Un vikingo guía a su hijo en una misión de venganza. Un samurái se enfrenta a su hermano por la sucesión del trono. Un piloto de la Segunda Guerra Mundial tiene que demostrar su valentía frente a las tropas enemigas. Pero estos guerreros no son mas que presas de un oponente desconocido. Esto es: Depredador: Cazador de Asesinos.
Las apuestas por la saga Depredador siempre han llevado consigo mostrar el miedo a lo desconocido. Esto al tiempo en que se sumerge al espectador en escenas de lucha contra un alienígena capaz de aniquilar civilizaciones enteras. Aún con dichos aspectos sobre la mesa, nunca se había mostrado el lado más salvaje no solo del Depredador, sino del humano mismo.
A lo largo de hora y media, la obra de Dan Trachtenberg muestra una antología visceral llena de intriga y momentos de acción que ponen en alto el porqué esta criatura se ha hecho de un lugar dentro de la cultura popular. En pocas palabras, por fin lo vemos en todo su esplendor. Y no es para menos, cabe recordar que el cineasta estuvo a cargo de Prey y Badlands, es decir, alguien que conoce la mitología del personaje.
En Xataka México tuvimos la oportunidad de ver de manera anticipada el filme escrito, producido y dirigido por Trachtenberg y no queda duda que los fanáticos van a gozarlo a lo grande. No solo porque nos muestra diferentes razas de los Yautja, sino sus enfrentamientos con diferentes culturas de la historia humana a través del tiempo. Casi como un What If de la saga.
Lo mejor de todo es el estilo de animación, recurso que también se aprovecha para mostrarnos escenas llenas de violencia que tal vez el estudio no se hubiera atrevido llevarlo al live-action. Además, su combinación entre 2D y 3D potencia el lenguaje visual que hace más disfrutable y digerible las tres historias interconectadas. Si viste El samurái de ojos azules te va a encantar.
Eso sí, puede que la resolución de cada conflicto se pronuncie de manera anticipada en favor de los protagonistas, lo cual llega a sentirse antinatural, pero al tercer acto cobra cierto sentido. Por si fuera poco, si realmente eres seguidor de las películas vas a encontrar referencias muy marcadas y un cliffhanger al final del metraje que dará pie a muchas dudas.
Ahora bien, cabe aclarar que el filme no se encuentra conectado de manera directa con alguna de las películas anteriores de la franquicia. Así, cualquier persona puede verla y pasarla bien por lo entretenida que es. Sin embargo, a mero juicio personal, es más disfrutable para aquellos adentrados a este universo y que están ansiosos por ver sangre verde derramada.
¿Es la mejor de la saga? Tal vez no. Tiene ciertos momentos que se sienten un tanto apresurados -que provocan una falta de empatía en comparación de la cinta original o incluso la estrenada en 2022-, pero la esencia ahí está y se agradece. Sin titubear, es un excelente aperitivo para la futura Badlands próxima a estrenar en noviembre.
Sentencia Xataka México. Lo bueno: la apuesta por la animación, así como los momentos de acción y violencia. Lo malo: lo efímero de los combates. Lo feo: nada; disfruta, entretente y déjate llevar por una entrega que da tintes de que las futuras producciones están en buenas manos, hasta ahora.
Si por tu parte gustas darle una oportunidad y disfrutar de la expansión a un clásico de la ciencia ficción, te recordamos que puedes encontrar Depredador: Cazador de Asesinos en exclusiva a través de Disney+ a partir de este 6 de junio 2025.
Cortesía de Xataka
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