La magistrada en retiro y excandidata a ministra de la Suprema Corte, Fabiana Estrada, aseguró que la nueva iniciativa de reformas a la Ley de Amparo no debilita la protección ciudadana frente al Estado, como algunos críticos han señalado, sino que introduce mecanismos para evitar abusos en su utilización y fortalecerlo como recurso efectivo en defensa de los derechos fundamentales.
En entrevista para el programa de Las Noticias con Alejandro Cacho, en Heraldo Televisión, Fabiana Estrada subrayó que el juicio de amparo es “una herramienta muy poderosa”, pero al mismo tiempo “paradójicamente muy compleja”, lo que ha permitido que algunos litigantes la utilicen para fines distintos a los que fue creada.
Se ha abusado del amparo para alargar juicios o para generar una ilusión de obligaciones”, explicó.
Uno de los puntos que destacó fue la figura de la recusación de jueces y magistrados, un recurso legítimo que permite a las partes cuestionar la imparcialidad de un juzgador. Sin embargo, relató, que en la práctica muchos abogados presentan recusaciones sin sustento con el único propósito de retrasar resoluciones en casos de gran impacto económico o fiscal. La iniciativa, dijo, propone que los tribunales puedan desechar de inmediato este tipo de intentos dilatorios.
Asimismo, resaltó la importancia de la digitalización en los procesos judiciales, que permitirá agilizar notificaciones y reducir tiempos.
Todo lo digital supone una gran agilización”, apuntó.
Otro de los temas que generan debate es la suspensión dentro del juicio de amparo, medida cautelar que busca evitar daños irreparables mientras se dicta sentencia. Estrada consideró positivo que se precise la posibilidad de negar suspensiones en casos donde se vulnera el orden público o el interés social, como en bloqueos de cuentas relacionados con lavado de dinero.
Si se concede la suspensión, el bloqueo pierde efectividad”, señaló.
En cuanto al interés legítimo, uno de los aspectos más discutidos, Fabiana Estrada recordó que su incorporación fue un avance significativo porque amplió el acceso al amparo a personas en una situación diferenciada frente a un acto de autoridad, aunque sin requerir un derecho subjetivo.
La reforma, explicó, introduce criterios para que los jueces evalúen con mayor precisión cuándo existe realmente esa posición diferenciada y cuándo el beneficio que se busca con el amparo es particular y no general.
Esto permitirá distinguir entre un interés legítimo y un simple interés ciudadano en que se respeten los derechos humanos”, sostuvo.
Finalmente, Fabiana Estrada reiteró que lejos de debilitar al amparo, las reformas corrigen prácticas indebidas y aseguran que esta figura siga siendo un recurso eficaz para la defensa de los derechos fundamentales.
Cortesía de El Heraldo de México
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