En la carretera México-Nogales, a la altura del puente el Seminario, en la capital Culiacán, fueron encontrados veinte cuerpos, cuatro de ellos, colgados y decapitados y el resto fueron descubiertos en el interior de una camioneta Ford tipo panel, cuyas llantas fueron dañadas.
La madrugada del lunes, las autoridades de seguridad fueron notificadas que en ese puente, que cruza la carretera federal, a la salida Norte de Culiacán los cuales habían sido decapitados, por lo que al presentarse, certificaron el hecho y al revisar la zona, les llamó la atención que una camioneta abandonada tenía una manta con mensajes.
Con auxilio de una grúa, la unidad fue trasladada al Servicio Médico Forense, al descubrir que, en su interior, se encontraban varios cadáveres, los cuales sumaron 16 víctimas, cuyas identificaciones aún no se conocen.
Feliciano Castro, portavoz del Gobierno de Sinaloa, condenó los actos criminales y dijo que las autoridades necesitaban examinar su estrategia para enfrentar al crimen organizado con la “magnitud” de la violencia observada: “En conjunto, las fuerzas militares y policiales están trabajando para restablecer la paz total en Sinaloa”.
La sangrienta lucha por el poder que ha paralizado a esa ciudad desde septiembre se desencadenó con el secuestro de Ismael “El Mayo” Zambada, del líder de uno de los grupos por parte de uno de los hijos del capo Joaquín “El Chapo” Guzmán, quien posteriormente lo entregó a las autoridades de Estados Unidos en un avión privado.
CT
Cortesía de El Informador
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