
Los vehículos 4×4 son un ícono de libertad. Más que un medio de transporte, representan un escape de la civilización hacia la naturaleza donde los límites desaparecen y comienza la aventura. Para muchos, adquirir un 4×4 es solo el inicio de un camino que no tarda en llevar al mundo del deporte motor y las modificaciones. Por ello, Bosco’s Camp 4×4 recomienda accesorios de cajón que vuelven tu unidad única e inigualable
Entre más equipado esté nuestro vehículo más probabilidades tenemos de disfrutar de una ruta todoterreno. Un elemento vital es conocer y aplicar la técnica de conducción adecuada.
Todo comienza con la experiencia. Es cuando descubrimos que, con mejores llantas, habríamos atravesado una zona de lodo; que, con mayor altura, esas piedras no habrían sido obstáculo o que, con un winch, podríamos haber alcanzado la cima para continuar el camino. Así nace la obsesión que se convierte en pasión: buscar nuevos desafíos, fijarse metas más exigentes y recorrer caminos que ponen a prueba tanto al piloto como a la máquina. Aunque no es indispensable modificar un vehículo para disfrutar del 4×4, cada tipo de terreno exige un equipo mínimo para garantizar seguridad y confianza.
Un neumático no solo es el responsable de mantener el contacto con la superficie por la que circulamos sino que además mejora el paso por lugares con poco agarre y tracción.
Entre lo esencial se encuentran los ganchos de arrastre, que deben instalarse firmemente en la parte frontal y trasera, sujetos al chasis, para evitar daños al remolcar. Su precio ronda los 700 pesos por par. A esto se suma un kit de suspensión de 4 pulgadas que mejora la altura y el desempeño sin comprometer demasiado el manejo diario; a todo ello debemos sumar los amortiguadores Rough Country que puede conseguirse desde $8,500 pesos.
Un winch se clasifica por su capacidad de trabajo. Son una gran herramienta para rescatar vehículos varados pero también para ayudar al mismo vehículo que lo porta, a salir de una trampa.
Luego de la suspensión el siguiente paso son los neumáticos. En la cima de desempeño está el BFGoodrich KM3, diseñado para off-road; es un referente por su adherencia y control. Un juego de cuatro llantas en medida 33×12.50 rin 17 cuesta alrededor de $40,000 pesos. Ningún equipo está completo sin un winch, el copiloto indispensable en rutas complicadas. El Warn Tabor de 10,000 libras se ofrece en kit completo por $12,600 pesos. A esto se pueden añadir accesorios como un snorkel, que evita daños al motor al cruzar ríos, o un kit de luces LED, que mejora la visibilidad y seguridad en rutas nocturnas.
El sistema de iluminación es un apartado que no puede faltar y que debe ser de los primeros en ser mejorado. Una ruta, planeada de día, puede alargarse hasta la noche.
En el mundo Jeep, Mopar ha invertido más de 100,000 horas en desarrollo y pruebas para crear más de 200 piezas y accesorios exclusivos para el Wrangler Rubicon JL 2025. Cada componente está diseñado para elevar la experiencia todoterreno a un nivel superior, manteniendo la garantía de fábrica y ofreciendo resistencia y rendimiento a la medida de los aventureros. La seguridad es un aspecto fundamental. Por más experimentado que sea un conductor, siempre habrá un momento en que se quede detenido ante un obstáculo. En el deporte motor 4×4, el rescate no significa accidente sino una rutina necesaria cuando se avanza en caravana por terrenos hostiles.
La adición de un snorkel aumentará la capacidad de vadeo y evitará el riesgo de que entre agua por el sistema de inducción.
El éxito de estas operaciones depende de aplicar la técnica adecuada y trabajar en equipo. Conocer los procedimientos de recuperación es tan importante como equiparse correctamente: la diferencia entre un rescate rápido y una larga espera está en la preparación.El verdadero aficionado al todoterreno no solo piensa en su vehículo, también sabe adaptarse al entorno. Acampar, cocinar con pocos medios o pasar la noche al aire libre forman parte de la experiencia. El espíritu aventurero requiere tanto del equipo mecánico como de la preparación personal. Por ello, nunca deben faltar una caja de herramientas, una eslinga de nylon para remolque, un GPS que permita mantener la ubicación, un botiquín de primeros auxilios, una lámpara de mano, una llanta de refacción en buen estado, baterías adicionales y víveres.
Los entusiastas del 4×4 no son únicamente conductores: son exploradores que buscan en cada ruta la sensación de aventura. A donde sea que los lleve su vehículo, contar con neumáticos especializados como los BFGoodrich KO3 y KM3 garantiza diversión con seguridad. En Bosco’s Camp 4×4 sabemos que cada aventura es única y por ello ofrecemos tienda y equipamiento para todoterrenos, pick-ups y SUVs, así como un taller profesional para preparar tu vehículo al máximo nivel.
Cortesía de El Economista
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