En 1950 Isaac Asimov publicó I, Robot; una colección de relatos de ciencia ficción basados en las tres leyes de la robótica que son un compendio fijo e imprescindible de moral, y se aplica, supuestamente, a todos los robots inteligentes. Sin embargo, los relatos terminan planteando una serie de problemas y paradojas sobre la situación del ser humano dentro del universo de la tecnología.
Es de esta obra que se adapta una película muy famosa con Will Smith como protagonista: Yo, Robot, que recientemente ha vuelto a las discusiones por un acto de Elon Musk.
De qué trata Yo, Robot
Chicago, año 2035. Los humanos viven en completa armonía con los robots inteligentes. A estas alturas del futuro los robots cocinan, conducen, cuidan a los niños y se confía completamente en ellos debido a que las leyes de la robótica les prohíbe hacerles daño a los humanos. Sin embargo, un inesperado suceso hace que un robot se vea implicado en el asesinato de un brillante científico.
El detective Spooner ahora ha quedado a cargo del caso, y junto a una psicóloga de robots, la doctora Susan Calvin, deberán resolver la paradoja del robot Sonny, correr riesgos imprevistos y evitar que se lleve a cabo un complot donde los robots podrían dominar a la raza humana.
Aunque la película se basa en la novela de Asimov, en realidad poco tiene que ver una obra con otra, pues la película solo retoma la ambientación y las tres leyes de la robótica que son:
- Un robot no puede hacer daño a un ser humano o, por su inacción, permitir que un ser humano sufra daño.
- Un robot debe obedecer las órdenes dadas por los seres humanos, excepto si estas órdenes entran en conflicto con la Primera Ley.
- Un robot debe proteger la existencia en su misma medida para no autodestruirse en la medida en que esta protección no entre en conflicto con la Primera o la Segunda Ley.
¿El robot humanoide Optimus de Elon Musk se inspira en Sonny?
Recientemente Elon Musk ha presentado un modelo robótico que ha sido tanto objeto de burla como de crítica en las redes sociales. Hablamos del robot humanoide Optimus, que según Musk serán el futuro de los robots, capaces de hacer todo aquello que los humanos requieran.
Pero la polémica vino porque los robots Optimus, así como el Cybercab y la Robovan, tienen diseños muy parecidos a los robots y automóviles de la película protagonizada por Will Smith. Incluso el director de la cinta, Alex Proyas, bromeo acerca de los diseños de las creaciones de Musk: “Hey Elon, ¿puedes devolverme mis diseños, por favor?” Se puede leer en una publicación de la red social X.
Mientras el futuro de los robots nos alcanza (o no), podemos volver a disfrutar de Yo, Robot. Aunque la película fue lanzada en 2004 con Will Smith de protagonista, todavía conserva un poco de esa magia del cine de ciencia ficción, y lo mejor, es que se puede ver sin costo adicional en streaming dentro del catálogo de Disney+.
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