En este par de años las producciones latinoamericanas, concretamente las de Argentina, han pisado fuerte el cine y la TV. Dos ejemplos de ello serían El eternauta, la exitosa serie de ciencia ficción y aliens de Netflix, y Cuando acecha la maldad, una película de terror tan buenas que ya prepara una secuela. Pero ninguna es tan perturbadora como 1978, una cinta infravalorada, estrenada en 2024, y que trata sobre un culto demoniaco; pero donde por momentos, la realidad supera a la ficción. La razón: la representación de un régimen totalitario y sus crueles prácticas contra la humanidad. En Xataka Cine y TV te contamos todo.
De qué trata 1978
Dirigida por los hermanos Luciano y Nicolás Onetti, este filme de origen argentino se sitúa en plena dictadura militar y durante la polémica final de la Copa del mundo de fútbol entre Argentina y Holanda. En este contexto histórico, la trama sigue a un grupo de torturadores y que irrumpe violentamente en un domicilio y secuestra a un par de jóvenes para llevarlos a un centro clandestino de detención, sin sospechar, que estos pertenecen a un misterioso culto guiado por una presencia sobrenatural desconocida.
La película retrata el miedo y el horror por partida doble: pues lo que comienza como un cruel interrogatorio, se termina convirtiendo en el infierno mismo para los torturadores. Es decir, al estar basada en un periodo histórico real de Argentina, distinguido por crímenes contra la humanidad, representa el miedo de uno de los periodos más oscuros de Latinoamérica. Pero también, al mezclarse con el género de películas de terror, apela a ese sentimiento sobrenatural característico de los filmes de horror; y eso, es lo que hace que la cinta sea tan perturbadora, porque por momentos, recordar las crueldades de un régimen que sí existió, es más escalofriante que los mismos demonios.
Historia y terror, la mezcla insospechada del filme
A pesar de que la cinta obtuvo un muy buen recibimiento en festivales de cine como Sitges y Screamfest, cuando por fin se estrenó en cines, la gente no logró entender uno de los pilares del filme: la revisión crítica y artística de la historia argentina, contada desde una perspectiva que incomoda al público, pero que también ofrece una innovadora propuesta cinematográfica y perturbadora al mezclar el horror sobrenatural con el terror real e institucionalizado de un régimen totalitario verdadero.
Llamamos infravalorada a la cinta argentina 1978 por un razón: pocas personas se detienen a entender lo que realmente están viendo más allá de los demonios sobrenaturales. El giro argumental es una poderosa metáfora donde la prisión secreta se transforma en un espacio donde se borran los límites entre los crímenes de Estado y lo paranormal; y el resultado, es una película sumamente inquietante. Por fortuna, si quieres darle una oportunidad a este filme, puedes ver la película en streaming a través de Max, sin costo adicional a la suscripción.
Cortesía de Xataka
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