Justo sobre el final del año, en el marco de la última sesión del Consejo Superior, la Universidad de Buenos Aires resolvió otorgar su máximo reconocimiento honorífico al artista argentino Carlos Alberto Indio Solari, por su destacada trayectoria y su aporte fundamental a la cultura popular.
En los considerandos de la resolución, se destaca que, “con una trayectoria artística de más de cinco décadas, su extensa obra musical lo ha convertido en una figura central del rock argentino y latinoamericano, así como en una personalidad destacada del arte y la cultura popular de nuestro país”.
Asimismo, subraya que fue cantante, co-compositor y letrista, co-fundador y voz emblemática del grupo Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, y actual referente creativo de Los Fundamentalistas del Aire Acondicionado, proyectos que se constituyeron en hitos de la música popular y en experiencias comunitarias singulares en torno a sus presentaciones en vivo.
Se destaca también que sus letras, de notable densidad poética y simbólica, han sido objeto de análisis desde múltiples perspectivas académicas -filosóficas, sociológicas, literarias y culturales- y que su obra ha contribuido a la construcción de un lenguaje propio, crítico de la realidad social, el poder y las desigualdades, con una relación singular y profunda con su público.
Así, en virtud de la originalidad de su obra, de su aporte a la cultura y al pensamiento crítico, y de su incidencia en la producción de sentidos colectivos que forman parte del patrimonio simbólico del país, la Universidad de Buenos Aires resolvió concederle esta distinción.
El 19 de agosto, Charly García fue a la sede de Puan de la UBA para recibir idéntica distinción, y en el acto dijo: “Gracias a la Universidad por este reconocimiento tan importante, desde ahora pasaré a llamarme Doctor Charly”.
Con esas palabras y levantando los dedos en V, rodeado de una multitud que colmó el aula 108 de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, recibió su Doctorado Honoris Causa. Fue una ceremonia breve pero emotiva, con el público cantando fervoroso, remeras con su rostro y música de fondo, el artista recibió el máximo galardón que otorga la institución luego de haber sido votado por unanimidad en el Consejo Superior.
Cortesía de Clarín
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