Por: Carlos Aguila Camacho
Mostrando y demostrando que las Ocurrencias son el verdadero Cambio y no las mentiras prometidas por López en campaña, nuevamente sale con la cara Ocurrencia de que el Ejército tenga una línea aérea.
Obviamente eso no lo había hecho público y no nos hubiéramos enterado de no haber sido porque la información es parte de la que le hackearon a la Sedena y no le quedó de otra a López que admitirlo. En el documento sobre este tema se señalan un proyecto para diseñar una firma estatal que no solo operará una flotilla de 10 aviones, incluido el polémico avión presidencial, sino que gestionará además otros seis aeropuertos, entre ellos, el de Felipe Ángeles en el Estado de México. López anunció que busca relanzar su propia versión castrense de la extinta Mexicana de Aviación con el objetivo de ampliar las rutas aéreas. Pero sin destacar cómo esquivará el problema legal que plantea el monopolio del Ejército con aviones, aerolínea y aeropuertos a su disposición.
La información contenida en los archivos hackeados, señala que para constituir la aerolínea va desde los 1.800millones de pesos y el gasto operativo y administrativo anual de la nueva aerolínea rondará entre los 1.000 y los 1.900 millones de pesos (unos 90 millones de dólares). El gasto puede variar según las aeronaves que se elija alquilar, las cifras tienen en cuenta 100 horas de vuelo al mes por avión. Los plazos, según el documento, para la creación de la compañía fijan una fecha límite: el 31 de diciembre de 2023.
NUEVA AEROLINEA, OCURRENCIA RECICLADA
Pero, es importante señalar, que esta Ocurrencia de crear una aerolínea no es nueva, sino reciclada, ya que, en agosto del 2021, ya había tocado el tema. Sin olvidar que casi todo lo que han creado del 1 de diciembre del 2018 que iniciaron hasta esa fecha, había fracasado. Con esa nueva ocurrencia salió López una aerolínea del gobierno, como si no estuviera enterado de la gran problemática y crisis en que estaba el sector aeronáutico en México y a nivel mundial. Pero eso es lo que menos le importaba, ya que como ganso en un Fórmula 1 lleva a cabo ocurrencia tras ocurrencia y siempre volviendo al pasado, en lugar de ver al futuro. Con esa nueva ocurrencia-aventura, pretendía realizarla utilizando lo que quedaba de empleados de la extinta Mexicana de Aviación, que la desaparecieron en el 2010; es decir, usar a pilotos y trabajadores de esa empresa, con esa también idea del pasado de crear una cooperativa formada por inversionistas y trabajadores,
Obviamente los inversionistas, los “de arriba” como López llama a los empresarios, a la gente que tiene dinero, esos “de arriba” tendrían que entrarle a la inversión que era de 155 millones de dólares en total con el 60% de la inversión y para completar el 40% restante sería con un crédito de la banca de desarrollo que les haría a los trabajadores que integrarían la cooperativa.
Pero todo iba hilado, ya que “casualmente” sería en el nuevo aeropuerto que en ese entonces construía la 4T en Santa Lucía, en donde estaría esta aerolínea, planteándose contar con 60 aviones en un plazo de 5 años. Se afirmaba que en dos semanas septiembre del 2021) lanzarían la convocatoria para crear dicha cooperativa.En esas fechas tocamos el tema, destacando que era importante destacar que en esos momentos se vivía una crisis en muchos aspectos derivados de la pandemia, entre ellos las aerolíneas, y era un enorme riesgo incursionar en este sector. Sin dejar de lado lo que había sucedido hacia poco tiempo, que la seguridad aérea en el país fue degradada de categoría uno a la dos y eso significaba un impedimento para que se autorizaran nuevas rutas y expansión en el extranjero.
Por otra parte, no sé si tomaron en cuenta todo lo que requiere una aerolínea en costos como la turbosina, permisos, los pagos de aterrizaje, despegue, eso en cuanto a las aeronaves, además de los enormes gastos en rentas de espacios, hangares y otros muchos más, sin olvidar los impuestos. Vale la pena recordar el enorme problema que enfrentaba en esos momentos Interjet y Miguel Alemán Magnani con el SAT por el pago de impuestos, que lo llevó a huir del país.
Y qué decir de lo que representa el mantenimiento de esas aeronaves, refacciones y el pago de seguros de las mismas. Y todo lo anterior era solamente una parte de lo complejo que representa tener una aerolínea. Y la verdad con la experiencia de que todo lo que han creado ha fracasado, esta no sería la excepción.
RECHAZAN AEROLÍNEA
En el mismo tenor, y en medio de esta nueva Ocurrencia, El Financiero publicó el 1 de septiembre del 2021, “Mandan a ‘volar’ a la Aerolínea del ‘Bienestar’: mayoría mexicana la rechaza”: El 52 por ciento de los mexicanos entrevistados por El Financiero Bloomberg está en desacuerdo con que el Gobierno promueva la creación de la nueva aerolínea. Por el contrario, el 40 por ciento apoya el surgimiento de la línea aérea y 8 por ciento indicó no saber al respecto.
Así se vislumbraba el embrollo en que se meterían con esa nueva ocurrencia, en la que como dice la estrofa de una canción de Juan Gabriel, “Pero qué necesidad”, ya que el país enfrentaba innumerables problemas, carencias, con millones de mexicanos en pobreza extrema, la inseguridad creciendo cada día más, el sector salud pasando por una enorme crisis y caos, como para salir con crear una nueva aerolínea.
Y sobre todo señalar que se requería de inversionistas, personas que tengan los recursos financieros para hacerlo, y son precisamente a quienes López los había tratado muy mal, desprestigiándolos al llamarles los “de arriba” y afirmando que él no por quedar bien con ellos, se olvidará del pueblo, ese pueblo que lo necesita, por eso no los apoya ni les da privilegios. Entonces ¿cómo conseguir inversores? Al menos que ya lo hubiere tratado en “lo oscurito” con quienes si aceptaran tratar e invertir con López y su 4T o fueran de los empresarios amigos que han resultado favorecidos. Aunque deberán de pensarlo dos veces, porque si esto fracasa ¿quién pagará los costos, los inversionistas o el gobierno?
Finalmente, no se concretó en esa ocasión hace ya más de un año, esa Ocurrencia. No sabemos si porque no hubo inversionistas que quisieran arriesgarse, o porque prefirió López dejársela al Ejército. De cualquier manera, no se vislumbra que eso vaya a ser algo que realmente funcione ahora con la SEDENA, pero la Ocurrencia vuelve a plantearse por segunda vez, como si no existieran temas de mayor importancia que resolver en el país, demostrando cuales son las prioridades para López y su 4-T.
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